A raíz de la nueva variante del COVID-19, el premier de Ontario pide que se hagan más pruebas en los aeropuertos canadienses.
Rodrigo Díaz M.
El premier de Ontario, Doug Ford, criticó hoy al gobierno federal por no avanzar más rápido en las pruebas de COVID-19 para los viajeros internacionales entrantes, ya que una nueva variante del virus está provocando más cierres de fronteras.
Ayer a última hora, el gobierno federal anunció que prohibía todos los vuelos de pasajeros procedentes del Reino Unido durante 72 horas debido a una nueva manifestación del COVID-19 que domina los casos en ese país.
Estudios sugieren que la nueva variante es más transmisible que otras cepas, pero hasta ahora no ha sido documentada en Canadá.
Health Canada dijo que no hay nada en este momento que sugiera que las mutaciones tengan algún efecto en la gravedad de los síntomas, la respuesta de los anticuerpos o la eficacia de la vacuna.
Varios países europeos anunciaron anteriormente que cerrarían sus fronteras con el Reino Unido mientras los funcionarios británicos luchan por contener la nueva cepa del COVID-19, que se ha atribuido a una mutación genética.
Aun así, el gobierno federal dijo que cerraría la frontera a los vuelos que llegaran para dar tiempo a los funcionarios de salud pública a reunir más pruebas y realizar investigaciones adicionales.
Global Affairs también publicó hoy un aviso en el que se dice a los canadienses que no viajen al Reino Unido debido a la nueva variante.
A principios de diciembre, Ford dijo que su gobierno ha estado trabajando activamente con los federales en el aeropuerto de Pearson para reducir el tiempo de inactividad de los viajeros que tienen que estar en cuarentena durante 14 días a su regreso.
“Hay ciertas personas que necesitan hacer la cuarentena, estoy seguro de que muchos lo hacen, pero estoy seguro de que hay un montón de personas que tampoco la hacen, casi puedo garantizarlo”, dijo Ford.