¿Ha emigrado recientemente a Canadá? He aquí algunos consejos para ayudar a los recién llegados a establecerse en la entidad financiera canadiense que mejor se adapte a sus necesidades.
Si aún no es ciudadano canadiense, es posible que tenga que visitar un banco en persona antes de que abran una cuenta a su nombre. La buena noticia: muchos bancos aceptan diversos documentos y referencias como prueba de identificación, incluidos pasaportes extranjeros y facturas recientes de servicios públicos.
Muchas sucursales de entidades financieras canadienses, sobre todo en las ciudades y pueblos más grandes, enumeran con orgullo todos los idiomas que habla su personal. Eso significa que existe la posibilidad de que le atiendan en el idioma de su elección.
Considere si desea realizar todas sus operaciones bancarias en un solo lugar. Aunque el hecho de que una sola entidad gestione todas sus cuentas puede facilitarle el seguimiento de sus ingresos y gastos, puede significar que se pierda los mejores tipos de interés y condiciones de préstamo que se ofrecen en otros lugares. Además, es posible que su entidad financiera no le apruebe todos los productos que desee.
Pregunte por las comisiones y costes antes de comprometerse. El uso que vaya a hacer de cada cuenta puede determinar el importe que deba pagar. Asegúrese de saber cuánto le costarán determinadas operaciones y si obtendrá intereses por el dinero que mantenga en la cuenta.
Antes de firmar, asegúrese de que entiende todas las condiciones de la cuenta, incluidas las comisiones. Pregunte todo lo que no entienda. Conserve una copia del contrato de cuenta para su archivo.
Los recién llegados a Canadá disponen de asesoramiento financiero fiable y gratuito. La Agencia del Consumidor Financiero de Canadá tiene una Base de Datos Canadiense de Educación Financiera en la que puede encontrar programas y eventos dirigidos a los recién llegados que cubren una amplia variedad de temas relacionados con el dinero.
-News Canada