Por Diego HERNÁNDEZ TEJEDA
Luis Suárez festejó su partido número 100 portando la playera de la selección uruguaya con el solitario gol que significó la victoria por 1-0 ante Arabia Saudita, y el pase a los octavos de final de la Copa Mundial Rusia 2018.
El atacante del Barcelona, aprovechó una pésima salida del portero árabe, Alowais, tras un saque de esquina en el minuto 22, y de volea con la zurda marcó el único gol del partido del la jornada dos del Grupo A disputado en el Rostov del Don.
Fue el gol número 52 con la selección “Charrúa” de Luis Suárez, que se convirtió en el sexto futbolista del país sudamericano que suma 100 partidos. El festejo extra con el balón dentro de la playera fue el próximo nacimiento de su tercer hijo.
Para este encuentro, el técnico de los Charruas, Oscar Tabarez realizó dos modificaciones en relación al once que inició y derrotó a Egipto, buscando sufrir menos y mandó a la cancha al ex jugador de Puebla y Monterrey, Carlos Sánchez en lugar de Nandez, y a “Cebolla” Rodríguez por De Arrascaeta.
Luis Suárez, Edison Cavani y compañía necesitarán algo más de lo que hicieron este día, el 25 de junio cuando enfrenten al anfitrión Rusia, en la disputa por el primer lugar del Grupo A, ya que necesitan el triunfo para conseguirlo. Y es que ambos equipos suman 6 puntos, pero los anfitriones son líderes por diferencia de goles.
Enfrente, Arabia Saudita, que fue goleado en su presentación por los rusos, esta vez, tocaron mejor la pelota, mostraron mejor futbol y hasta tocaron la puerta del guardameta de la selección uruguaya, Muslera, nacido en Argentina, pero de padres “charrúas”, pero para su mala fortuna no cuentan con un jugador de la talla del propio Luis Suárez, Edison Cavani y el propio Diego Godín, cuando va en busca de los saques de esquina.
Sin embargo, los árabes, cuentan con un admirador de Cristiano Ronaldo, como Alburayk, quien en el minuto 7, en un cobro de tiro libre, adoptó el parado del goleador portugués del Real Madrid, aunque su disparo fue rechazado por la defensa uruguaya.
Los “hijos del desierto”, que calificaron a su quinta Copa del Mundo de la mano del holandés Bert van Marwijk, pero que después fue cesado y llegó el pampero Edgardo Bauza, que solo duro dos meses y fue relevado por el hispano-argentino, Juan Antonio Pizzi, dejaron atrás los malos momentos vividos contra Rusia, pero también los de tensión y miedo cuando la aeronave que los trasladaba a Rostov, sufrió un incendio en una de sus turbinas, dejaron todo en el vestidor y fueron diferentes.
Claro, también es verdad que el técnico de Arabia Saudita, Juan Antonio Pizzi, ex jugador del Toluca en la época de los 90s, cambió prácticamente todo el once titular que inició ante los anfitriones y solo repitieron tres: Alburayak, Osama y Otayf. Alowais estuvo en la portería en lugar de Al Maiouf, Ali por Hawsawi, Yasser por Al Sharani, Hatan por Al Dawasari, Salman por Al Faraj, Taiser por Al Jassim, Salem por Al Shehri y Fahad por Al Sahlawi.
Arabia Saudita cerrará la fase de grupos en un duelo de trámite ante el también eliminado Egipto, en un duelo donde solamente estará en juego el honor.
