Rodrigo Díaz M.
El empresario ruso Yevgeny Prigozhin declaró haber interferido en las elecciones de Estados Unidos y que seguiría haciéndolo en el futuro, la primera admisión de este tipo de una figura implicada por Washington en los esfuerzos para influir en la política estadounidense.
En comentarios publicados por el servicio de prensa de su empresa de catering Concord en el equivalente ruso de Facebook, VKontakte, Prigozhin dijo: “Hemos interferido en las elecciones estadounidenses, estamos interfiriendo y seguiremos interfiriendo. Con cuidado, con precisión, quirúrgicamente y a nuestra manera, como sabemos hacerlo”.
El comentario del estrecho aliado del presidente ruso Vladimir Putin fue publicado en la víspera de las elecciones de mitad de período en Estados Unidos, en respuesta a una solicitud de comentarios de un sitio de noticias ruso.
“Durante nuestras operaciones puntuales, extirparemos los dos riñones y el hígado a la vez”, dijo Prigozhin. No dio más detalles sobre el críptico comentario.
Prigozhin, al que se suele llamar “el chef de Putin” porque su empresa de catering opera con contratos del Kremlin, ha sido acusado formalmente de patrocinar “granjas de trolls y bots” con sede en Rusia que buscan influir en la política estadounidense.
En julio, el Departamento de Estado de Estados Unidos ofreció una recompensa de hasta 10 millones de dólares por información sobre Prigozhin en relación con la “participación en la interferencia electoral de Estados Unidos”. Ha sido objeto de sanciones por parte de Estados Unidos, Gran Bretaña y la Unión Europea.
Prigozhin, que cumplió nueve años de prisión en la época soviética por robo y otros delitos antes de dedicarse a los negocios durante la década de 1990, había mantenido durante mucho tiempo un perfil público bajo. Pero este año se ha desatado en las redes sociales, incluso criticando la actuación de los generales rusos en Ucrania.
En octubre, tras el éxito de la contraofensiva ucraniana en la región de Kharkiv, Prigozhin emitió una declaración en la que pedía que los mandos militares rusos fueran despojados de sus medallas y “enviados con armas de asalto descalzos al frente”.
En septiembre, admitió haber fundado la firma de mercenarios Wagner Group, alineada con el Kremlin, que está activa en Siria, África y Ucrania. Prigozhin había demandado anteriormente a los periodistas por informar de que estaba vinculado a Wagner.
El viernes pasado, Wagner inauguró un centro tecnológico de defensa en San Petersburgo, un paso más de Prigozhin para destacar sus credenciales militares.
Moscú no ha ocultado que desea que Estados Unidos ponga fin a su apoyo militar a Ucrania y presione a Kiev para que llegue a un acuerdo de paz con Rusia que implique concesiones territoriales.
