Rodrigo Díaz M.
Esta última semana ha sido devastadora para la humanidad. El COVID-19 fue elevado al estatus de pandemia por la Organización Mundial de la Salud, lo que ha llevado al mercado financiero mundial a desplomarse y a las empresas y tiendas a cerrar debido al peligro de contagio.
En Canadá, el primer ministro Trudeau ordenó el cierre de locales nocturnos, restaurantes y recomendó el cierre de tiendas y centros comerciales. Escuelas y universidades alrededor del país han declarado la transición al aprendizaje online debido al cierre de sus instalaciones.
De igual manera, se está planeando una legislación para justificar la ausencia de aquellos empleados de cualquier compañía o establecimiento que estén o se crea que estén infectado con el coronavirus.
Empresas alrededor del mundo se han visto obligadas a realizar la transición al trabajo remoto o desde casa. En vista de esta situación, El Centro News conversó con Moe Vela, ex director financiero del vicepresidente Gore y ex director de administración del vicepresidente Joe Biden, quien es experto en la materia.
“Creo que el trabajo remoto o a distancia es absolutamente necesario dada la situación actual”, dijo Vela. “Trabajar desde casa ayuda a mitigar la transmisión del coronavirus, la gente acude menos al transporte publico y no interactúa con otros empleados en las oficinas”.
Vela, quien también es uno de los jefes ejecutivos de transparencia de TransparentBusiness, una compañía que creó un software para aumentar la productividad de los empleados que laboran remotamente y no en las oficinas, reveló que aún existen dudas por parte de las empresas con respecto al trabajo remoto.
“La preocupación que siempre ha existido con el modelo de trabajo remoto es la productividad”, explicó Vela. “El objetivo de empresas como TransparentBusiness es lograr que la productividad de los personajes que trabajan desde casa sea igual o superior que cuando laboran en las oficinas”.
Por otro lado, Vela admitió que algunas empresas no pueden hacer la transición al modo de trabajo remoto debido al tipo de servicio que ofrecen y que el sistema está solo disponible para compañías que usen la internet y que dependan de equipos informáticos.
Vela también declaró que otro de los desafíos del trabajo remoto era la supervisión de los trabajadores que realizan sus labores fuera de la oficina, pero que ahora eso es cosa del pasado.
“El trabajo remoto es viable en estos tiempos, con aplicaciones de teleconferencia como Skype, Facetime y el uso masivo de las computadoras o teléfonos inteligentes y de la internet expandida como está ya no hay excusa para, inclusive, aplicar este modo de trabajo después que pase la crisis del coronavirus”, dijo Vela.
“Con el software que ofrecemos y el que otras compañías ofrecen es posible monitorear el trabajo que realizan los empleados fuera de la oficina por lo que la productividad de una empresa puede ser igual o superior a la que tendría desde dondequiera que estén los trabajadores”, aseguró Vela.
Según Vela, su objetivo y el de los empresarios es realizar todo tipo de acciones para que las empresas no quiebren, pero admitió que la salud de los empleados debe estar de primero.
“Las empresas están ahora obligadas a pasar a este modelo de trabajo”, dijo Vela. “Simplemente no tienen opción al haberse decretado el virus como pandemia”.
Sim embargo, Vela admitió que, dentro lo malo, siempre se debe de buscar el lado positivo de las cosas.
“Esta situación puede ser el empujón que el modelo de trabajo remoto necesitaba para afianzarse”, explicó Vela. “Muchas empresas ya hacen uso del modelo y de las tecnologías que implica, esta crisis solo puede servir para que esto se masifique y así, probablemente, se pueda evolucionar en el ámbito laboral”.
