Por Rafael Garcia
TORONTO. Dulce se encuentra consigo misma, 30 años después, frente al espejo del tiempo. La elipsis temporal del guion de “La casa del fin de los tiempos”, primera película de terror venezolana, lleva al espectador a un recorrido por diferentes momentos de la vida de Dulce, protagonizada por la ex reina de belleza Ruddy Rodríguez.
Dulce regresa de prisión a la casa donde tres décadas antes fue encontrado el cadáver de su esposo acuchillado y donde el mayor de sus hijos desapareció sin dejar rastro.
Cuando Dulce pone un pie en casa, el sacerdote de la parroquia cercana la visita y le pide que revele qué pasó aquel trágico día, pues él sabe que ella es inocente a pesar de que las autoridades encontraron las huellas de la mujer en la escena del crimen.
Así, el religioso se convierte en los rieles donde corre y transita toda la historia de “La casa del fin de los tiempos”, un filme que al inicio puede llegar a saber a un cuento viejo, con sabor a narrativa tele novelesca y escenas de películas infantiles.
Nada sorprendente. Sin embargo, su director Alejando Hidalgo, logra dar vuelta a la tuerca en el momento justo y comienza a girar la trama, llevando a Dulce a cambiar el pasado para determinar el futuro. Hidalgo permite que Dulce atraviese una ventana del tiempo que le permite matar a su mismo esposo antes de que el hombre asesine a su pequeño hijo.
Así, el director descoloca al espectador de lo previsible y somete su atención hasta el final de la película.
La producción es parte de un esfuerzo para motivar la producción nacional dijo la Cónsul General de Venezuela en Toronto, Yolanda Brito, quien explicó que Venezuela tiene como regla incluir en las salas de exhibición al menos un 20 por ciento de producción cinematográfica nacional.
La exhibición se realizó en uno de los teatros de Ryerson University en la ciudad de Toronto, el pasado 29 de junio, organizada por el Toronto Latin American Film Festival (LATAFF), que es un proyecto cinematográfico del Hispanic Canadian Heritage Council (HCHC).
El público estuvo distribuido casi equitativamente entre espectadores latinoamericanos y canadienses interesados en tener una prueba del arte hispanoparlante.
“Es importante porque se da a conocer la cultura y el arte. El horror no es uno de mis géneros preferidos, pero es una buena película”, consideró la nicaragüense Ana Chavarría.
Hidalgo estrenó “La casa del fin de los tiempos” en 2013, a los 28 años de edad, luego de haber filmado tres cortometrajes y haber consolidado su formación en cine con una licenciatura en Comunicación Social en la Universidad Santa María, cursando talleres del Centro Nacional Autónomo de Cinematografía y un seminario con Robert McKee, entre otros antecedentes importantes.
Datos sobre el cine venezolano
Manuel Trujillo Durán es considerado el precursor del cine venezolano, pues un 28 enero de 1897, hace 121 años en el teatro Baral, de la ciudad de Maracaibo, proyecto “Un célebre especialista sacando muelas en el Gran Hotel Europa” y “Muchachas bañándose en la Lago de Maracaibo”.
“La dama de las Cayenas”, que se estrenó en 1916, es considerada la primera película de ficción venezolana de largo metraje.
En 1938, aparece el sonido sincrónico, diálogos y musicalización en la película “Taboga”.
En la etapa del cine contemporáneo venezolano, el récord de espectadores nacionales ha sido de 3.5 millones.
Entre el palmarés del cine venezolano, se cuentan al menos 130 premios y reconocimientos internacionales.
