19 mar (EFE).- El presidente salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, expresó este martes su “contundente” rechazo a cualquier iniciativa que pretenda privatizar el agua en el país, en momentos en que una propuesta legislativa abrió la puerta a la presencia del sector privado en el ente rector del servicio.
En un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, Sánchez Cerén señaló que su Gobierno “rechaza contundentemente cualquier tipo de privatización de este bien público”.
Además, el mandatario salvadoreño, que entregará el poder próximo 1 de junio a Nayib Bukele, llamó a la Asamblea Legislativa “a escuchar el clamor del pueblo y a no aprobar una ley que privatice la gestión del agua”.
El pronunciamiento de Sánchez Cerén se produce luego de que la Comisión de Medio Ambiente y Cambio Climático de la Asamblea Legislativa aprobó un acuerdo para incluir a representantes del sector agropecuario e industrial en la Autoridad Nacional del Agua (ANA).
El acuerdo forma parte de un anteproyecto de ley que debe ser discutido en su totalidad y pasar al pleno del Congreso para su aprobación.
El mismo fue aprobado con los votos de representantes de los partidos derecha Alianza Republicana Nacionalista (Arena, derecha), Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA, centroderecha), Partido Demócrata Cristiano (PDC) y Partido de Concertación Nacional (PCN).
Los dos diputados del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) se opusieron a la iniciativa, mientras que un diputado de GANA, el partido con el que Bukele ganó las elecciones de febrero pasado, se abstuvo.
Según una publicación del Congreso, el diputado de GANA Adelmo Rivas señaló el lunes que “la correlación de la autoridad hídrica quedaría favorable al Estado, pues el sector privado tendrá únicamente a dos representantes, mientras que del sector estatal estarán cinco”.
No obstante, Rivas dijo este martes en una rueda de prensa que su partido rechaza el acuerdo porque “el agua no puede estar en manos de privados”, pese a que admitió que votó para permitir la participación del sector agropecuario en el ANA.
Bukele también expresó el lunes su rechazo a la iniciativa de que representantes privados formen parte de la directiva del ente rector del agua, y pidió al presidente Sánchez Cerén que vete cualquier ley que en ese sentido sea aprobada por el Congreso.
Organizaciones sociales exigieron a los diputados de la comisión dicha comisión revertir el acuerdo, mientras que autoridades y sindicatos de la Universidad de El Salvador convocaron para el miércoles una marcha “urgente por la defensa del agua” y “en contra de la privatización del vital líquido”.
El Congreso salvadoreño lleva años intentando aprobar una llamada Ley General de Aguas en medio del rechazo de diversos sectores de la sociedad, entre ellos la Iglesia Católica, que denuncian una supuesta intención de privatizar el servicio, lo que ha llevado a la realización de decenas de manifestaciones de calle.