Rodrigo Díaz M.
El consumo de tabaco está disminuyendo en todo el mundo, según un nuevo informe publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Se calcula que en el 2022 consumían tabaco 1.25 billones de personas mayores de 15 años, es decir, una de cada cinco personas del planeta. Esta cifra es inferior a los 1.36 billones de personas (una de cada tres) del año 2000.
Según el informe de la OMS, se prevé que para el próximo año esta cifra disminuya a 1.23 billones y a 1.19 billones para el 2030.
Esta cifra es inferior a la del 2010, cuando el 18,8% del mismo grupo de edad consumía tabaco. La agencia mundial de la salud prevé que Canadá reducirá su consumo de tabaco en un 44% el año que viene en comparación con ese año.
La agencia de salud insta a los países a seguir aplicando políticas para frenar el consumo de tabaco o prohibirlo.
Además del riesgo de desarrollar cáncer de pulmón o cardiopatías debido al consumo directo de tabaco, también existe el riesgo de exposición al humo ajeno, o lo que se a veces se refiere como el fumador pasivo.
A pesar de la tendencia a la baja en el consumo, la OMS afirma que cabe esperar que las muertes relacionadas con el tabaco sigan siendo elevadas.
El organismo también está preocupado por el consumo de tabaco sin combustión y cigarrillos electrónicos entre los jóvenes.
En una declaración del mes pasado, la OMS instó a los gobiernos a tratar los cigarrillos electrónicos de forma similar al tabaco y prohibir todos los sabores. La mayoría de los cigarrillos electrónicos y productos de vaping contienen nicotina, una droga estimulante que se encuentra en el tabaco.