Susana Donan
El Banco de Canadá mantuvo la semana pasada su tasa de interés de referencia en el 5%, con el interés bancario en el 5,4% y el interés de depósito en el 5%. El Banco seguirá en línea con su política monetaria de endurecimiento cuantitativo.
La economía mundial se está ralentizando y se prevé que el crecimiento siga moderándose, ya que las anteriores subidas de las tasas de interés oficiales y el reciente aumento del rendimiento de los bonos mundiales pesan sobre la demanda.
El Banco central prevé un crecimiento del PIB mundial del 2,9% este año, del 2,3% en el 2024 y del 2,6% en el 2025. Aunque estas perspectivas de crecimiento mundial apenas varían con respecto al Informe de Política Monetaria (IPM) de julio, la composición ha cambiado, ya que la economía estadounidense se muestra más fuerte y la actividad económica en China más débil de lo esperado.
El crecimiento en la zona europea se ha ralentizado aún más. La inflación ha disminuido en la mayoría de las economías, a medida que se resolvían los cuellos de botella de la oferta y la menor demanda aliviaba las presiones sobre los precios. Sin embargo, ante la persistencia de la inflación subyacente, los bancos centrales siguen vigilantes. Los precios del petróleo son más altos de lo previsto en julio, y la guerra en Israel y Gaza es una nueva fuente de incertidumbre geopolítica.
En Canadá, cada vez hay más indicios de que las anteriores subidas de las tasas de interés están frenando la actividad económica y aliviando las presiones sobre los precios. El consumo se ha moderado, con una menor demanda de vivienda, bienes duraderos y muchos servicios. El debilitamiento de la demanda y el aumento de los costos de los préstamos están lastrando la inversión empresarial.
El aumento de la población canadiense está aliviando las presiones del mercado laboral en algunos sectores, al tiempo que aumenta la demanda de vivienda y el consumo. En el mercado laboral, los recientes aumentos de empleo han sido inferiores al crecimiento de la población activa y las ofertas de empleo han seguido disminuyendo. Sin embargo, el mercado laboral sigue siendo tenso y persisten las presiones salariales. Varios indicadores sugieren que la oferta y la demanda en la economía se acercan al equilibrio.
Tras registrar un promedio del 1% el año pasado, se prevé que el crecimiento económico siga siendo débil durante el próximo año, antes de aumentar a finales del 2024 y hasta el 2025. La debilidad del crecimiento a corto plazo refleja tanto el impacto generalizado de las anteriores subidas de las tasas de interés como la ralentización de la demanda exterior.
En conjunto, el Banco de Canadá espera que la economía canadiense crezca un 1,2% este año, un 0,9% en el 2024 y un 2,5% en el 2025.
Las expectativas de inflación a corto plazo y el comportamiento de los precios empresariales se están normalizando sólo gradualmente, y los salarios siguen creciendo en torno al 4% y al 5%.
Con señales más claras de que la política monetaria está moderando el gasto y aliviando las presiones sobre los precios, el Consejo de Gobierno decidió mantener la tasa de interés oficial en el 5% y continuar normalizando el balance del Banco de Canadá. Sin embargo, al Consejo de Gobierno le preocupa que los avances hacia la estabilidad de precios sean lentos y que hayan aumentado los riesgos inflacionistas, y está preparado para empezar otro ciclo de aumentos de la tasa de interés oficial si fuese necesario.