Rodrigo Díaz M.
Arqueólogos del norte de Perú han desenterrado una tumba de tres mil años de antigüedad que, según creen, podría haber honrado a un líder religioso de élite del país andino hace unos tres milenios.
Apodado el “Sacerdote de Pacopampa”, en referencia a la zona arqueológica del altiplano donde se halló la tumba, el sacerdote estaba enterrado bajo seis capas de ceniza mezclada con tierra negra, con cuencos de cerámica decorados y sellos que indican una antigua pintura corporal ritual utilizada para personas de élite, según informó el sábado el Ministerio de Cultura de Perú en un comunicado.
También se encontraron dos sellos en los bordes superiores de la tumba, uno con un rostro antropomorfo mirando hacia el este y otro con un diseño de jaguar mirando hacia el oeste.
El director del proyecto, Yuji Seki, dijo que el gran tamaño de la tumba, de casi dos metros de diámetro y un metro de profundidad, era “muy peculiar”, al igual que la posición del cuerpo tumbado boca abajo con una mitad del cuerpo extendida y los pies cruzados.
También se encontró en el cuerpo un hueso con forma de tupu, un gran alfiler utilizado por los amerindios andinos para sujetar capas y ponchos, que habría servido para sujetar la manta de una mujer, añadió.
“Aunque esta persona es un hombre, las asociaciones son muy peculiares”, dijo Seki. “Creo que se trataba de un líder de su época”.
El Proyecto Arqueológico Pacopampa ha estado trabajando en la zona desde 2005, dijo el ministerio, y agregó que las capas de roca indican que el sacerdote, que habría sido enterrado alrededor de 1.200 antes de Cristo, era unos cinco siglos más antiguo que las tumbas de la “Señora de Pacopampa” y los “Sacerdotes de la Serpiente Jaguar de Pacopampa”, descubiertas en el 2009 y el 2015, respectivamente.
Sin embargo, se cree que el hallazgo del año pasado del “Sacerdote de los Pututos” es más antiguo.