Rodrigo Díaz M.
Mientras que algunas personas pueden experimentar uno o dos aspectos del sueño deficiente, un estudio estadounidense publicado en la revista Scientific Reports sugiere que experimentar múltiples aspectos del sueño deficiente podría agravar los problemas de salud ya existentes.
Los investigadores de la Escuela de Envejecimiento de la Universidad del Sur de Florida se centraron en ciertos aspectos de la salud del sueño, como la regularidad, la satisfacción, el estado de alerta durante las horas de vigilia, el momento de dormir y la duración del sueño.
Sus hallazgos sugieren que cada problema de salud declarado por los participantes en el estudio suponía un aumento del 54% en el riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca. En el caso de los participantes seleccionados, cuyos datos de salud se confirmaron mediante el uso de un dispositivo de monitorización que registraba su actividad de sueño, el sueño deficiente se asoció con un aumento del 141% del riesgo.
La edad media de los participantes en el estudio era de 53 años.
El estudio también señaló investigaciones anteriores que sugieren que el sexo y la raza pueden influir en la salud del sueño.
Según los datos, los hombres suelen ser más propensos a desarrollar un inicio más temprano de la apnea obstructiva del sueño, mientras que las mujeres son más propensas a reportar síntomas de insomnio debido a los cambios hormonales que afectan a los ritmos circadianos.
En cuanto a la raza, los investigadores observaron que los individuos de raza negra son más propensos a experimentar alteraciones del sueño y una menor duración del mismo que sus homólogos de raza blanca.
“Estos hallazgos muestran la importancia de evaluar los problemas de salud del sueño coexistentes en un individuo para captar el riesgo de enfermedad cardíaca”, dijo la autora principal del estudio, Soomi Lee, en un comunicado de prensa.
Una de las limitaciones del estudio fue que no se hizo un seguimiento de los cambios en la salud del sueño y la salud a lo largo del tiempo, algo que, según los investigadores, es una “dirección futura de este trabajo”.
Si bien los hallazgos pueden ser utilizados como una herramienta de predicción para detectar los primeros signos de la enfermedad cardíaca, los investigadores dicen que también puede ser útil para ayudar a prevenir los problemas de salud más adelante en la vida.
“Dado que la salud del sueño es modificable, comprender la salud multidimensional del sueño en la edad adulta media puede contribuir a futuras estrategias de prevención destinadas a mitigar el riesgo de enfermedades cardíacas, que son una de las principales causas de muerte en los Estados Unidos”, señalaron los investigadores en el estudio.