Rodrigo Díaz M.
El premier de Ontario, Doug Ford, reconoció ayer en su discurso de trono que se puede hacer más para aliviar las presiones del sistema sanitario, pero no ofreció ninguna solución nueva al problema que ha provocado el cierre temporal de urgencias en toda la provincia.
La vicegobernadora Elizabeth Dowdeswell pronunció el discurso del trono de Ford, que marca el inicio de una nueva sesión legislativa, y dijo que el gobierno conservador progresista está trabajando con las partes interesadas para identificar ideas para abordar el problema.
Ford ha sido premier de Ontario desde 2018, y el discurso promociona lo que ya ha hecho en materia de salud, incluyendo la adición de miles de camas de hospital y enfermeras, la inversión en la atención domiciliaria y comunitaria, la introducción de una subvención para atraer a los profesionales de la salud a las zonas rurales y remotas, y la planificación para añadir 30 mil nuevas camas de atención a largo plazo.
“Aunque estas inversiones históricas han contribuido a sostener el sistema sanitario de la provincia durante el periodo más difícil de la historia moderna, no cabe duda de que, al igual que los sistemas sanitarios de todo Canadá, sigue sufriendo importantes presiones, como el agotamiento de la plantilla y el aumento de la tensión en los servicios de urgencias”, declaró Dowdeswell.
“Todavía se puede hacer más. El gobierno está colaborando activamente con los socios de los sistemas de salud para identificar soluciones urgentes y viables, y aplicará las medidas necesarias para ayudar a aliviar las presiones inmediatas, al tiempo que garantiza que la provincia esté preparada para permanecer abierta durante cualquier oleada invernal.”
Los servicios de urgencias de hospitales de toda Ontario han cerrado durante varias ocasiones este verano, lo que, según los expertos, se debe a la crisis de personal de enfermería. Muchos han instado a Ford a derogar la legislación de restricción salarial del sector público que introdujo en 2019, diciendo que está dañando los esfuerzos para reclutar y retener a las enfermeras.
El discurso de trono comienza hablando de una “creciente sensación de incertidumbre” global, en medio del COVID-19, la alta inflación y la guerra en Ucrania, en particular sus impactos en las cadenas de suministro.
“Un gasto sin precedentes a lo largo de la pandemia ha creado nuevos retos fiscales aquí en Ontario y en todo Canadá que requerirán una gestión económica prudente en los meses y años venideros”, dice el discurso.
“En conjunto, estos desafíos fiscales y económicos que se avecinan no pueden ser subestimados o ignorados. Hay que afrontarlos de frente. Y no hay soluciones fáciles”.
El discurso de Ford señala el aumento de la tasa de interés en respuesta a la elevada inflación y advierte que Ontario, como el resto del país, debe estar preparada para la posibilidad de una desaceleración económica a corto plazo.
También promociona en gran medida partes clave del programa de Ford, como la construcción de autopistas y otras infraestructuras, la atracción de inversiones en la fabricación de vehículos eléctricos y una estrategia de oficios cualificados que busca solucionar la escasez de mano de obra.
Por último, el discurso señala que, como prometió durante las elecciones, el gobierno aumentará las ayudas económicas para las personas con discapacidades en un 5% y vinculará los futuros aumentos a la inflación; y ofrece una nueva promesa de invertir 225 millones de dólares adicionales en pagos directos a los padres “para ayudar a sus hijos a ponerse al día con la escuela”.