Rodrigo Díaz M.
La avanzada tecnología de impresión en 3D se está utilizando para fabricar armas que se venden a “delincuentes peligrosos”, advirtió hoy la Policía Provincial de Ontario (OPP) al anunciar una serie de detenciones relacionadas con la fabricación de estas armas imposibles de rastrear.
Según la OPP, la investigación se inició en Montreal y, en última instancia, dio lugar a órdenes de registro y detenciones en toda Canadá, con 11 personas acusadas de 58 delitos en Ontario.
“Esta investigación se inició después de que la policía tuviera conocimiento de un negocio que vendía piezas de armas de fuego”, dijo la OPP.
Los investigadores añadieron que las piezas no son compatibles con otras armas y se utilizan “exclusivamente para crear armas de fuego de fabricación personal.”
Aún más preocupante, añadió la OPP, es que las armas son totalmente ilocalizables.
“Aunque todas las armas prohibidas plantean graves riesgos para la seguridad de la comunidad, esto es especialmente cierto en el caso de las armas de fuego de fabricación personal. A diferencia de otras armas de fuego, no llevan número de serie y no pueden rastrearse.
“Se fabrican y se ponen a disposición de delincuentes peligrosos que pueden utilizarlas en un delito o para facilitar una actividad delictiva”.
La OPP ejecutó 14 órdenes de registro el 20 de junio de 2023, incautándose de 10 pistolas impresas en 3D, 43 pistolas parcialmente fabricadas, 10 impresoras 3D, así como munición, chalecos antibalas ymil pastillas sospechosas de fentanilo.
También se incautaron de 33.700 dólares canadienses en efectivo, así como de una cartera de criptomoneda, entre otros artículos.
Ese mismo día también se ejecutaron órdenes de registro en British Columbia, Alberta, Saskatchewan, Manitoba, Quebec, New Brunswick y Nova Scotia.
“Hoy, nuestras comunidades son más seguras gracias a la colaboración de nuestros socios policiales, que trabajan juntos para reducir el número de armas de fuego de fabricación personal que se producen y se trafican en comunidades de todo el país”, declaró el inspector de policía Lee Fulford.
“Los acusados han demostrado un flagrante desprecio por la normativa en materia de armas de fuego, y la OPP se compromete a hacerles responsables de sus actos”.