Gerald Souliere, el abogado en cuestión, le dijo a la corte el martes que Jacques Corriveau debe cumplir su condena en su comunidad.
Corriveau, de 83 años, fue declarado culpable de fraude contra el gobierno, falsificación y lavado de productos del crimen entre 1997 y 2003 durante lo que se conoció como el famoso escándalo de patrocinio.
La investigación del gobierno federal que examinó el programa de patrocinios encontró que ciertas firmas estaban ganándose contratos basados en donaciones a los liberales federales, pero que las compañías habían realizado muy poco trabajo.
Souliere dice que Corriveau no hizo nada para que el valor de los contratos se inflara.
El abogado también afirma que la edad avanzada de su cliente y debido a las donaciones considerablemente grandes que su cliente dio a lo largo de los años a organizaciones benéficas deben ser tenidas en cuenta a la hora de sentenciar a su cliente.
En otras palabras el abogado afirma que por la edad de su cliente y por sus donaciones la sentencia que le corresponde debe ser menor que la otorgada por la Corona.
Sin embargo la Corona ha sugerido que Corriveau debe pasar hasta cinco años en prisión