Un tribunal español ha declarado al ex futbolista del Barcelona y de la selección brasileña Dani Alves culpable de violar a una mujer en una discoteca de Barcelona, condenándole a cuatro años y medio de prisión.
Dani Alves, de 40 años, uno de los futbolistas más laureados de la historia, había negado haber agredido sexualmente a la mujer en la madrugada del 31 de diciembre del 2022.
Su abogada había pedido su absolución y dijo que recurriría el veredicto.
Además de imponer a Alves una condena de cuatro años y medio, el tribunal le impuso otros cinco años de libertad condicional.
La fiscalía había solicitado una pena de nueve años de prisión. En España, una denuncia por violación se investiga bajo la acusación general de agresión sexual, y las condenas pueden conllevar penas de prisión de cuatro a 15 años.
Según los medios de comunicación españoles, el tribunal tuvo en cuenta la decisión de Alves de pagar a la víctima 150 mil euros en concepto de daños y perjuicios independientemente del resultado del juicio cuando decidió la duración de su pena de prisión.
Sin embargo, el tribunal no aceptó el argumento esgrimido por sus abogados de que se le debía imponer una pena más leve porque estaba ebrio.
Su esposa, Joana Sanz, de 31 años, dijo que parecía muy borracho cuando regresó a su casa de Barcelona la noche de la violación y que se había golpeado contra los muebles antes de desplomarse en la cama.
Pero el tribunal argumentó que su consumo de alcohol no había afectado su comportamiento.
Los fiscales dijeron que Alves y su amigo habían comprado champán para tres mujeres jóvenes antes de que Alves atrajera a una de ellas a una zona VIP de la discoteca con un baño del que ella no tenía conocimiento.
En ese momento, Alves se tornó violento y obligó a la mujer a mantener relaciones sexuales con él a pesar de sus reiteradas peticiones para que desistiera.