WASHINGTON / OTTAWA. — El presidente Donald Trump reiteró hoy que no espera alcanzar un acuerdo comercial con Canadá antes del plazo del 1 de agosto, y advirtió que impondrá aranceles del 35 % a bienes canadienses que no cumplan con las reglas del USMCA (Tratado de Libre Comercio). Este anuncio intensifica la tensión entre ambos países.
El primer ministro canadiense, Mark Carney, junto a varios primeros ministros provinciales, suavizaron sus expectativas sobre un acuerdo inminente, prefiriendo optar por una negociación más beneficiosa que ceder bajo presión temporal. Los líderes evaluaron alternativas como fortalecer el comercio intraprovincial, diversificar socios internacionales y promover compras locales como medidas para mitigar los impactos de posibles barreras arancelarias.
Según analistas, estas tensiones comerciales vienen acompañadas de una coyuntura económica compleja: el Banco de Canadá prevé mantener la tasa de interés en 2.75 % en la reunión del 30 de julio, aunque se esperan hasta dos recortes más durante 2025. La economía ha mostrado señales de contracción técnica, con una posible recesión en el segundo trimestre, mientras la inflación se modera hacia el objetivo del 2 % y el crecimiento del empleo continúa débil.
En este contexto, el desmontaje de las barreras comerciales internas también cobra relevancia. Canadá ya trabaja en eliminar restricciones que dificultan el flujo de bienes entre provincias, medida vista como clave para reforzar la resiliencia económica frente a amenazas externas.
Aunque el conflicto actual pone presión sobre sectores como automotriz y agroexportador, los líderes se muestran cautelosos pero confiados en que una estrategia de largo plazo ofrecerá mejores resultados que acuerdos apresurados.











