Conoce las razones por las que el cepillo de dientes no debe ser tu única línea de defensa contra la mala higiene dental.
Stefany Jovel
Instagram: @stefany.jovel
El mejor secreto para mostrar una linda sonrisa es cuidar la dentadura de forma constante. De acuerdo con estudios de la Asociación Dental Canadiense, siete de cada diez personas lidiarán con enfermedades dentales y en las encías durante su vida.
La buena noticia es que, manteniendo una rutina de higiene dental, las primeras etapas de enfermedades bucales pueden revertirse o prevenirse de manera efectiva.
Estos son algunos consejos para mantener sus dientes y encías felices, saludables y listos para sonreír.
1. Cepillarse y usar hilo dental regularmente
Este consejo puede parecer obvio, pero realmente es la primera línea de defensa contra un posible desastre dental. Una acumulación de placa (o en su etapa más avanzada, sarro) en la boca crea el escenario ideal para que las bacterias puedan provocar una infección.
Es necesario cepillarse por completo dos veces al día, especialmente en la línea de las encías. También debes usar hilo dental por lo menos una vez al día, raspando los lados de cada diente varias veces y usando hilo de seda limpio cada vez.
2. Seleccionar una pasta de dientes que prevenga la gingivitis
Una pasta especial para las encías es otro elemento que debe agregarse a tu caja de herramientas de salud bucal, esto con el objetivo de mantener los dientes y encías en excelente estado. Busca un producto que esté especialmente diseñado para atacar la placa bacteriana y que prevenga enfermedades en las encías. Las señales de advertencia de la gingivitis son las encías rojas e hinchadas y posible sangrado al cepillarse o al usar hilo dental.
3. Cepillo de dientes con cerdas suaves
El cepillado es la piedra angular en la prevención de las enfermedades bucales y de las encías, pero cepillar demasiado fuerte puede dañar ambos. Para evitar dañar tu boca durante el cepillado debes utilizar un cepillo de dientes con cerdas suaves, ya que las cerdas duras pueden irritar las encías y desgastar el esmalte dental. Es aconsejable usar un cepillo de dientes eléctrico que esté equipado con un cabezal redondo, que controle la presión y que tenga precisión para limpiar cuidadosamente las encías y al mismo tiempo llegar a esos lugares difíciles de alcanzar.
4. Protector bucal
Es muy común que durante la noche las personas tengan la tendencia a rechinar los dientes mientras duermen, o incluso de manera inconsciente durante el día. El rechinar los dientes (o bruxismo) puede causar dolor, rotura o desgaste de los dientes.
El protector bucal se ajusta a los dientes para cubrirlos y protegerlos mientras duermes. También puedes incorporar algunos métodos de relajación para reducir la presión de la mandíbula y el rechinar de los dientes, que generalmente son el resultado del estrés y la ansiedad.
5. Enjuague bucal antibacteriano.
Existen diferentes tipos de enjuague bucal que pueden matar bacterias que causan mal aliento, placa, caries y gingivitis. El enjuague bucal antibacteriano puede brindar protección contra la caries y el sarro, la prevención de manchas, el esmalte reforzado y, por supuesto, el aliento fresco. Este enjuague puede ser particularmente útil para aquellas personas que tienen dificultades con el cepillado o el uso de hilo dental.
6. Limitar los alimentos azucarados y ácidos
Los alimentos con alto contenido de ácido o azúcar pueden tener un efecto dañino en el esmalte de los dientes. Esto provoca sensibilidad, especialmente al calor y al frío. No tienes que eliminar los dulces o el café de la mañana por completo, solo considera disfrutarlos con moderación.
7. Visita a tu dentista
Las limpiezas dentales y exámenes profesionales son clave para mantener una buena salud bucal, ya que los dentistas pueden eliminar la placa que el cepillado y el uso de hilo dental no puede remover. El dentista también podrá detectar signos tempranos de enfermedades bucales y de las encías antes que se conviertan en un problema mayor.