Por Raúl A. Pinto
“IF” es la mas reciente película del director John Krasinski, autor de las geniales “A Quiet Place”, y conocido por sus papeles en “The Office” y “Jack Ryan” (la primera más que la segunda). Esta cinta familiar es una exploración conmovedora de la imaginación infantil y adulta, donde la acción de los actores de carne y hueso y la animación con actores haciendo las voces convergen en una narrativa fantástica que puede ser apreciada transversalmente. Con una clara influencia pixeriana, algo no poco común en nuestros días, donde los modelos a seguir en narrativa animada/infantil se apegan a Pixar, Ghibli o Dreamworks, el director crea un cuento que suenas demasiado familiar, pero que se sostiene por su honestidad y encanto.
La historia parte con Bea – interpretada muy bien por Cailey Fleming- una niña obligada a crecer de forma acelerada tras la muerte de su madre y los problemas de salud que enfrenta su padre. Luego de moverse a New York, a casa de su abuela, Margaret (un acierto tener a Fiona Shaw en todas las producciones cinematográficas posibles), Cailey se topa con Cal, un misterioso pero bonachón personaje que tiene como misión reasignar a amigos imaginarios (tal como lo lee) a nuevos niños, considerando que los adultos ya no los recuerdan.
Interpretando a Cal, Ryan Reynolds actúa de Ryan Reynolds, pero como todavía lo toleramos como tal, sigue encantando en su papel de el mismo, como siempre lo ha hecho. Es, de hecho, excelente ver lo bien que su personalidad calza en películas familiares, más allá de Deadpool y otros filmes para adultos de las que también es favorito. Su carisma es el ancla de la cinta, y su increíble química con la pequeña Cailey se ve y se siente genuina.
El elenco de voces en conjunto esta también muy bien elegido, destacando Steve Carell como Blue, la gran criatura púrpura, que expresa sus sentimientos con demasiada intensidad, y Phoebe Waller-Bridge como Blossom, la mariposa/hada/Betty Boop que camina con elegancia y ternura. Se suman el recientemente fallecido Louis Gossett Jr., Akwafina, Amy Schumer, Richard Jenkins, Emily Blunt, y un cuarto de Hollywood.
Antes de hablar de la historia, mencionaré que, visualmente, “IF” es un triunfo. Muy acertadamente, el director trabaja con dos productoras titanes de los efectos visuales y las criaturas fantásticas del cine, Cadence Films y Framestore, que dan credibilidad incluso cuando sabemos que lo que vemos es animación. Ambas casas productoras colaboran e insertan sus criaturas y situaciones entendiendo que la historia es el centro de la trama, mas que lo que vemos. Esta simple filosofía hace que el trabajo en efectos visuales se disfrute mucho.
Aunque el guion, también de Krasinki, sea bastante original en detalles y en diálogos, “IF” no logra encumbrarse entre las mejores de su director, ni del género, ni siquiera del 2024. Mas que homenajes, las referencias a Toy Story e Inside Out parecen copias, y se notan más de lo que uno quisiera. Esta predictibilidad no se siente muy bien, y se salva por el talentoso trabajo del director, quien ama su cinta, y pone cariño en cada ángulo. Un detalle no menor.
Uno de los logros más significativos de la película es su atrevimiento para hablar de temas complejos como el duelo y el miedo a la pérdida con sensibilidad. Las bellas animaciones y el humor hacen que esto pasen por sobre las cabeza de muchos infantes, y al mismo tiempo resuena fuerte en los adultos. También el director se preocupó de crear un elaboradísimo final, que cierra la historia con excelencia.
Como lo ve, creo que son los menores los que darán el veredicto final hacia la película. Y a pesar de la historia original, “IF” tiene todos los elementos para convertirse en una favorita de los más pequeños. Disponible en salas.
Desde La Pantalla.