Rodrigo Díaz M.
El gobierno colombiano ha declarado una zona arqueológica protegida en torno al galeón San José, hundido por la Marina Real Británica en 1708 en el mar Caribe.
El barco, cuya propiedad sigue siendo objeto de disputa, transportaba uno de los mayores cargamentos de objetos de valor jamás perdidos en el mar cuando fue atacado a las afueras de la ciudad colombiana de Cartagena.
Se calcula que llevaba un tesoro de hasta 20 billones de dólares).
En aquel momento, el buque transportaba su valioso cargamento al rey español para ayudarle a pagar su guerra contra los británicos. Casi 600 tripulantes se hundieron con él.
En la primera fase del proyecto de investigación, denominada “fase de caracterización”, se utilizarán sensores remotos para generar imágenes del yacimiento y elaborar un inventario del material arqueológico del fondo marino.
El Instituto Colombiano de Antropología e Historia informó de que los robots submarinos también tomarán lecturas en torno al pecio, que se utilizarán para elaborar estudios académicos.
Las fases posteriores dependerán de lo que se descubra en esta primera fase del proyecto. El título del proyecto se traduce como ”hacia el corazón del galeón San José”.
Juan David Correa, ministro de cultura de Colombia, calificó la expedición exploratoria de “sin precedentes”.
Según el Gobierno colombiano, la declaración del yacimiento como zona protegida permitirá preservarlo, dado su “alto valor científico y patrimonial”.
Colombia anunció el descubrimiento de los restos del naufragio en el 2015, pero desde hace tiempo existen disputas legales sobre a quién pertenece el contenido del barco.
La empresa de salvamento estadounidense Sea Search Armada es una de las partes que lo reclama, al igual que España.
El gobierno colombiano ha declarado que no está previsto realizar excavaciones arqueológicas en la fase inicial del proyecto.