Rodrigo Díaz M.
Muchos en Ontario que recibieron la primera dosis de la vacuna contra el COVID-19 de Oxford-AstraZeneca están cancelando sus citas para la segunda dosis de esa vacuna tras las nuevas orientaciones del grupo consultivo nacional de vacunas.
La Asociación de Farmacéuticos de Ontario dijo que la situación tenía a muchos de sus miembros preocupados por el inventario restante de AstraZeneca que podría terminar desperdiciándose, a pesar de que la provincia mantiene que los residentes pueden seguir optando por esa vacuna si lo desean.
“Si la gente rechaza la vacuna de AstraZeneca, se va a quedar en los refrigeradores porque nadie la quiere. No hay nada que podamos hacer con ella y creo que es una pena”, dijo en una entrevista el director general de la asociación, Justin Bates.
Las cancelaciones se empezaron a producir de forma masiva después de que el Comité Consultivo Nacional de Inmunización cambiara su recomendación para las personas que recibieron la vacuna de AstraZeneca como primera dosis, diciendo que era mejor que recibieran las vacunas de Pfizer-BioNTech o Moderna mRNA como segunda dosis.
La orientación se actualizó debido a la evidencia de una respuesta inmune más fuerte con esa mezcla de dosis y un menor riesgo de coágulos sanguíneos raros pero graves.
Ontario actualmente cuenta con aproximadamente 160 mil dosis de vacunas de AstraZeneca disponibles, con inyecciones ofrecidas a través de farmacias y algunos centros de atención primaria.
Bates dijo que las farmacias seguirán ofreciendo AstraZeneca a los clientes que lo deseen, aunque señaló que muchos clientes estaban expresando su frustración por la nueva orientación. “La gente está confundida”, dijo. “Están enfadados y no les culpo por estarlo”.