Rodrigo Díaz M.
Canadá y otros cuatro países siguen tratando de presionar a Irán para que libere las grabadoras de vuelo del derribo de un avión de pasajeros ucraniano el 8 de enero, dijo ayer el Ministro de Transporte Marc Garneau.
El 11 de marzo, Garneau estaba en la reunión de Montreal de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI por sus siglas en inglés) cuando el representante de Irán prometió que su gobierno entregaría las llamadas cajas negras a las autoridades ucranianas para el 25 de marzo.
“Las cajas siguen en Irán y seguimos ejerciendo presión”, dijo Garneau en una reunión informativa del gobierno.
“Dijeron que sería dentro de dos semanas. Eso coincidió con el inicio del brote del COVID-19 en Irán. Y explicaron que no estaban en condiciones de abordar ese asunto en ese momento”.
El representante de la OACI en Irán, Farhad Parvaresh, no estaba en la reunión de Montreal pero hizo la promesa por teléfono.
La pandemia ha devastado a Irán, pero el régimen todavía debe entregar las grabadoras de vuelo para cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional de la aviación civil, dijo Garneau.
“Seguimos ejerciendo presión sobre Irán para que transfiera esas cajas de acuerdo con sus obligaciones”, dijo.
El vuelo 752 de Ukraine International Airlines fue derribado por dos misiles iraníes poco después de despegar del aeropuerto de Teherán, matando a los 176 pasajeros a bordo, incluidos 55 ciudadanos canadienses y 30 residentes permanentes. Decenas de pasajeros más se dirigían también a Canadá, muchos de ellos estudiantes y académicos que regresaban de las vacaciones de invierno.
El vuelo Teherán-Kyiv fue una primera etapa muy popular para los viajes del Irán al Canadá.
Gran Bretaña, Ucrania, Afganistán y Suecia también perdieron ciudadanos cuando el avión fue destruido, y los países han formado una alianza con el Canadá y están presionando a Irán para que coopere en una investigación transparente para que se pueda determinar la causa del ataque con misiles y del accidente y se pueda pagar una indemnización a los seres queridos de las víctimas.
Inicialmente, Irán encubrió la causa del accidente, pero se vio obligado a admitir que su Guardia Revolucionaria disparó dos misiles contra el avión.
El incidente ocurrió justo después de que Irán lanzara misiles contra Irak en dos bases militares estadounidenses como represalia por haber matado a Qassem Soleimani, el principal general de Irán, días antes. Una de las bases objetivo incluía tropas canadienses.
Las familias de algunos de los muertos en el avión de Ucrania han dicho que Ottawa estaba haciendo oídos sordos a sus preocupaciones debido a su renovado enfoque en el brote de la pandemia.
El gobierno ha nombrado a Ralph Goodale, ex ministro de seguridad pública, como asesor especial en el accidente. Goodale Se ha reunido con las familias de las víctimas en las últimas semanas.
El último puesto de Goodale en el gabinete incluía la supervisión de la RCMP y la asistencia a reuniones internacionales de aplicación de la ley.
Los enviados de Ucrania y Gran Bretaña han dicho que eso hace a Goodale bien calificado para presionar a Irán por respuestas.
