Rodrigo Díaz M.
A pesar de la tendencia a la baja den los casos de COVID-19, el primer ministro Justin Trudeau avisó que Canadá no se precipitará en la reapertura de su frontera con los Estados Unidos a los viajes no esenciales.
Las peticiones de un plan de reapertura han empezado a intensificarse a medida que la cobertura de la vacuna ha aumentado a ambos lados de la frontera.
La Casa Blanca dijo la semana pasada que no había decidido cuándo o cómo reabrir la frontera con Canadá, pero grupos empresariales y legisladores, entre ellos el gobernador de Vermont, Phil Scott, y el representante de Nueva York, Brian Higgins, han instado a ambos países a elaborar un plan de reapertura.
Trudeau expresó que, aunque mucha gente está deseando que se reabra la frontera, cualquier flexibilización de las restricciones debe hacerse con cuidado y teniendo en cuenta la seguridad de los habitantes de Canadá.
“Estamos en el camino correcto, pero tomaremos nuestras decisiones basándonos en los intereses de los canadienses y no en lo que quieran otros países”, dijo en una conferencia de prensa en Ottawa.
Trudeau sugirió que el 75% de los habitantes de Canadá deben estar vacunados y que los casos diarios deben seguir disminuyendo en todo el país antes de que su gobierno esté dispuesto a aliviar las restricciones de viaje.
“Todos queremos reabrir, todos queremos volver a viajar para ver a los amigos, tomar vacaciones, ir de viaje”, dijo. “Pero no queremos tener que volver a cerrar, volver a apretar porque haya otra ola”.
La frontera terrestre está cerrada a los viajes no esenciales desde marzo de 2020, y la medida se extendió recientemente hasta, al menos, el 21 de junio.