Rodrigo Díaz M.
La estrella de la WNBA Brittney Griner ha sido liberada de una colonia penal rusa en un intercambio de prisioneros por el traficante de armas Viktor Bout, según un alto funcionario de la administración.
Griner está ahora bajo custodia de funcionarios estadounidenses, según anunció el presidente Joe Biden, y se encuentra en un avión de regreso a los Estados Unidos.
La basquebolista fue detenida por primera vez en febrero, después de que los funcionarios de aduanas rusos encontraran botes de vaporizador con aceite de cannabis en su equipaje. En julio se declaró culpable de cargos relacionados con drogas y fue condenada a nueve años de internamiento en una colonia penal, donde permaneció desde principios de noviembre.
Griner, dos veces campeona olímpica y una de las mayores estrellas de la WNBA, era la estadounidense más destacada detenida injustamente en el extranjero hasta su liberación el día de hoy. El gobierno de Biden se ha enfrentado a intensas presiones para traerla a casa.
“Brittney Griner ha demostrado valentía y determinación durante los últimos 300 días”, tuiteó USA Basketball tras la liberación de Griner. “Esperamos volver a ver a Brittney cuando sea el momento adecuado y le deseamos lo mejor en los próximos días y semanas”.
En la negociación para la liberación de Griner, las autoridades estadounidenses acordaron un intercambio de prisioneros con Bout, que en su día fue descrito por el Departamento de Justicia de Estados Unidos como uno de los traficantes de armas más prolíficos del mundo.
Bout, ex teniente coronel soviético, fue apodado el “Mercader de la Muerte” por sus hazañas, e incluso inspiró una película de Hollywood, Señor de la Guerra. Bout fue detenido en Tailandia en 2008 tras una elaborada operación encubierta de Estados Unidos.
El canje de Griner por Bout tuvo un alto precio, dejando atrás a otro estadounidense detenido en Rusia. Paul Whelan, que también es ciudadano canadiense, irlandés y británico, ha estado encarcelado injustamente en Rusia por cargos de espionaje desde 2018.
Las autoridades estadounidenses habían expresado durante meses su determinación de traer a casa tanto a Griner como a Whelan, pero la ejecutiva de seguridad de Michigan no fue incluida en el canje.
El intercambio se llevó a cabo a pesar del deterioro de las relaciones entre las dos potencias mundiales. Pero el encarcelamiento de los estadounidenses produjo una rara apertura diplomática, que dio lugar al contacto de más alto nivel conocido entre Washington y Moscú en más de cinco meses.
Además de los esfuerzos de los funcionarios estadounidenses, la liberación se produjo tras meses de negociaciones en las que participaron Bill Richardson, ex embajador de Estados Unidos ante las Naciones Unidas y emisario habitual en las conversaciones sobre rehenes, y su principal adjunto, Mickey Bergman. Estos hombres habían realizado múltiples viajes al extranjero en el último año para discutir escenarios de canje con contactos rusos.