Una familia brasilera en Ottawa está a punto de ser deportada luego que su asesora de inmigración cerrara su oficina y dejara de responder tras recibir los 3 mil dólares que ellos pagaron. Paulo y Leila Miera, quienes llegaron a Canadá en 2016 con sus dos hijas, confiaron en la consultora Ana Raquel Aparicio Perdomo para mantener sus permisos de trabajo al día y guiarlos en su camino hacia la residencia permanente. Sin embargo, al intentar renovar sus visas este año, descubrieron que su expediente estaba incompleto, que las tarifas biométricas no habían sido pagadas y que habían perdido su estatus migratorio sin haber sido informados.
La situación se agravó cuando Paulo intentó contactar a Perdomo sin éxito y encontró su oficina vacía en el centro de Ottawa. Poco después, su hija mayor localizó fotos de la consultora de viaje en Europa, mientras la familia enfrentaba el impacto de trabajar sin estatus. Al comunicarse directamente con Inmigración, se enteraron de que sus permisos habían sido rechazados meses atrás y que el aviso oficial nunca les fue entregado. Tanto Paulo como Leila debieron dejar sus trabajos, y su hija Ester perdió el suyo, dejando a la familia sin ingresos y dependiendo de la ayuda de amigos.
Aunque la licencia de Perdomo fue suspendida en junio y revocada en noviembre por no responder a los requerimientos del Colegio de Consultores de Inmigración y Ciudadanía, esto no revirtió el daño causado. Abogados especializados señalan que, aun siendo víctimas de negligencia profesional, las posibilidades de que el gobierno restituya su estatus son mínimas. Con un aumento en deportaciones y mayor dificultad para obtener permisos temporales, la familia enfrenta un futuro incierto. Mientras buscan apoyo legal, su mayor esperanza es evitar regresar a Brasil, país que sus hijas consideran ya lejano comparado con la vida que han construido en Canadá durante casi una década.
Brasileros pierden estatus en Canadá luego de ser estafados por asesora
Comments











