Rodrigo Díaz M.
Los liberales de Ontario han elegido a Bonnie Crombie, alcaldesa de Mississauga durante tres mandatos y ex diputada, para enfrentarse al premier Doug Ford en las próximas elecciones provinciales.
Crombie fue elegida para el cargo en un momento en el que el tercer partido de la legislatura busca reconstruirse tras dos derrotas electorales sucesivas.
“Hemos construido un equipo liberal grande y fuerte y ahora, siento decíroslo, tenemos que cavar un poco más hondo”, dijo Crombie a los asistentes a la convención de líderes en su discurso de victoria del sábado.
“Doug Ford y sus conservadores vendrán a por nosotros en cualquier momento, así que tenemos que estar preparados”.
La alcaldesa de Mississauga se impuso al diputado liberal Nate Erskine-Smith, al diputado liberal y ex ministro del gabinete provincial Yasir Naqvi, y al ex diputado liberal y actual miembro del caucus provincial Ted Hsu, en una convención de líderes liberales de Ontario que pasó por tres rondas de recuento de papeletas.
Crombie dijo que quiere aprobar los presupuestos de Mississauga y de la región de Peel, y que después planea dimitir como alcaldesa “a principios del nuevo año”. De momento no ha decidido si buscará un escaño en la legislatura o si se limitará a viajar por la provincia para presentarse a los votantes y recabar apoyos para el partido.
Los liberales se habían jactado de que en la carrera por el liderazgo los candidatos habían registrado un número récord de afiliados, con más de 100 mil personas con derecho al voto para elegir al nuevo líder, frente a 44 mil y 38 mil en las dos contiendas anteriores.
Pero sólo una parte de esos afiliados votó el pasado fin de semana: 22.827 personas. El partido señaló que la participación fue superior a los 12.988 liberales de Ontario que votaron en la carrera por el liderazgo del 2020 y más que los 19.438 del 2013.
Crombie, como alcaldesa de Mississauga, ha sido una firme opositora a los cambios de Ford en la forma en que los municipios recaudan ciertas tasas de los promotores que ayudan a las ciudades a financiar la infraestructura, la Asociación de Municipios de Ontario ha dicho que la medida perjudicó a los municipios en cinco billones de dólares, y ha presionado fuertemente para la disolución de la región de Peel.