Por Inmaculada Tapia.
EFE/REPORTAJES.
La belleza japonesa se ha nutrido de beber e incluso bañarse en agua hidrogenada por sus propiedades curativas y rejuvenecedoras.
El hidrógeno se ha convertido en uno de los principios claves de belleza para la piel, de la misma manera que el ácido hialurónico o la vitamina C.
FRENA Y RESTAURA.
Tal y como explica el doctor Ricardo Vicario, de la Clínica Vicario, “la oxidación celular está ocasionada por el propio envejecimiento y acelerada por hábitos tóxicos, mala protección o bien producto del mal funcionamiento de la mitocondria y, podríamos decir, que el hidrógeno puede frenarlo y restaurarlo”.
Una razón por la que diferentes países orientales han probado sus propiedades terapéuticas.
“El hidrógeno es un componente elemental de la vida y del cosmos”, comenta Vicario.
“Es el factor químico más ligero y común en existencia, por eso, no es casualidad que el hidrógeno sea proporcionalmente la molécula primordial de nuestras células, ya que nuestro cuerpo está formado en un 60 por ciento de agua, cuyos elementos son el oxígeno y el hidrógeno”.
Vicario considera al hidrógeno como la principal fuente de energía que tenemos a nuestro alcance. “Su bajo tamaño molecular permite que pueda penetrar en lugares donde otras sustancias no pueden hacerlo, lo que le da una capacidad para penetrar por diferentes barreras celulares”.
“Siendo considerablemente más pequeño que otros antioxidantes, el hidrógeno es capaz de penetrar en el núcleo de las células, resguardando el ADN del ataque de los radicales libres, es capaz de capturarlos, resguardando y reestructurando la piel y el cuerpo”, apunta este experto.
Para los investigadores de la firma cosmética Perricone, el hidrógeno es conocido como la fuente más “prometedora de carburante limpio del planeta”, al que otorgan beneficios antiinflamatorios “sin rival”.
EN EL NÚCLEO DE LA CÉLULA.
Una razón por la que el dermatólogo americano y fundador de la firma, el Doctor Perricone ha creado una fórmula, el H2 Energy Complex, con la que mantienen el hidrógeno estable en la cosmética y así proporciona niveles de esta molécula en la piel, cien veces superiores a la que obtenemos al ingerirlo.
El hidrógeno es vital para nuestra piel porque, al ser una molécula que puede penetrar en el núcleo de la célula donde se almacena el ADN, neutraliza y reduce los radicales libres vinculados al envejecimiento, proporcionando una “poderosa hidratación, un rejuvenecimiento visible y una apariencia radiante”, explican desde la firma americana.
EL PODER REAL DEL HIDRÓGENO.
La directora de formación de Prerricone MD, Raquel González, explica que “el poder real del hidrógeno es capaz de regular las moléculas mensajeras, las que indican a las células que produzcan cientos de enzimas antioxidantes que contrarresten los radicales libres. En resumen, el hidrógeno motiva a las células para que se conviertan en un factor antioxidante”.
La responsable de formación de Medik8, Gloria Montero, asegura que el hidrógeno tiene beneficios sobre la piel, pues “la protege del estrés oxidativo como un antioxidante neutralizando los radicales libres. De este modo, se previenen dichas lesiones cutáneas proporcionando una poderosa hidratación, un rejuvenecimiento visible y una apariencia radiante en la piel”.
PARA TODO TIPO DE PIELES.
Además, añade que se trata de una molécula apta para todo tipo de pieles y “todas las edades”, aunque especifica que se trata de “un elemento que está enfocado a pieles deshidratadas y cansadas, por lo que es un bueno empezar a aplicárselo a partir de los 25 años”.
“Además, el hidrógeno al ser la molécula del universo, es el perfecto hidratante para aquellas pieles con tendencia grasa que necesitan un plus de hidratación”, apunta Montero.
Estefanía Nieto, responsable de formación de Elizabeth Arden Pro, considera el hidrógeno el ingrediente perfecto cuando tenemos la piel “tirante y seca y necesitamos que la hidratación penetre rápidamente en las capas superficiales de la piel. El hidrógeno penetra con facilidad en las capas internas dando un extra de vitalidad e hidratación”.