Por Raúl A. Pinto
Los practicantes de la religión Sikh en la provincia de Alberta serán exentos de usar casco al conducir motocicletas a partir del 12 de abril.
Esta exención, que será aplicada a la Ley de Seguridad del Tráfico de esa provincia será cambiada por el Ministro de Transporte de Alberta Brian Mason, quien hizo el anuncio el jueves pasado. El reglamento para esta provincia ya había sido aplicado anteriormente en Manitoba y British Columbia.
El Ministro expresó que el cambio había sido pedido por miembros de la comunidad Sihk, quienes apelaban a la libertad que tienen de expresar sus libertades religiosas.
“Creemos que la cantidad de personas que llevarán un turbante y no un casco va a ser bastante pequeña, así que decidimos que esta decisión era la correcta”, dijo. Mason agregó que la comunidad de la provincia ha solicitado la exención en los últimos 30 años. Se aplica a los conductores y pasajeros mayores de 18 años que son miembros de esta religión, conocida en español como Sijismo.
Gurpeet Pandher, perteneciente al Grupo de Motociclistas Sij de la ciudad de Edmonton, publicó un comunicado en las redes sociales, llamando a este anuncio un “hito y un día memorable” en la historia de Alberta. “Este cambio traerá nuevas oportunidades / negocios a talleres de reparación de bicicletas / tiendas de accesorios para el mercado y concesionarios de motocicletas, etc.”, escribió Pandher.
El médico general, Dr. Louis Francescutti, quien es también asiduo a las motocicletas dijo a CBC News que sigue preocupado por los peligros que podría acarrear el montar este vehículo sin el uso de un casco. “La realidad es que esto pondrá en riesgo la vida de las personas y es algo que desafortunadamente no se debatió públicamente. La verdad es que no puedo imaginarse andar sin casco.
El hecho que en el 2018 estemos discutiendo esto va más allá de mi comprensión”, dijo Francescutti. El Grupo de Motociclistas Sikh agradeció por las gestiones al NDP Rod Loyola, de la circunscripción Edmonton-Ellerslie, por haber tomado la iniciativa en el asunto.
Aunque el Ministro Mason reconoció que Loyola tiene una gran cantidad de constituyentes pertenecientes a esa creencia, insistió que se otorgó este beneficio por motivos religiosos, y no por presión popular,