Rodrigo Díaz M.
Un chico de 14 años se enfrenta a cargos de asesinato en primer grado después de que un “tiroteo masivo” en el aparcamiento de un colegio de Toronto a principios de mes dejara dos muertos y otros tres heridos.
La Policía de Toronto hizo la actualización el lunes después de que la investigación del tiroteo del 2 de junio, que ocurrió en el aparcamiento del North Albion Collegiate Institute, captara la atención de la ciudad.
Seymour Gibbs, de 46 años, y Delroy George Parkes, de 61, murieron en el tiroteo.
“Estos actos de violencia sin sentido se han saldado con la muerte de dos personas inocentes y con familias que quedarán destrozadas para siempre por la pérdida de sus seres queridos”, declaró el sargento Phillip Campbell en la rueda de prensa del lunes.
La policía dijo que las víctimas estaban reunidas en la escuela después de jugar al fútbol más temprano en el día, cuando dos sospechosos se detuvieron en una camioneta oscura, salieron y comenzaron a disparar.
Los equipos de emergencia acudieron al lugar de los hechos sobre las 11 PM horas de aquel día. Cuando llegaron, encontraron a cinco personas heridas de bala. Todas las víctimas eran hombres de edades comprendidas entre los 40 y los 60 años.
Las víctimas fueron trasladados al hospital y Delroy murió allí, según la policía. Gibbs murió tras sucumbir sus heridas en el hospital unos días después. Tres de las víctimas presentaban lesiones que no ponían en peligro su vida.
En ese momento, la policía dijo que estaba buscando una camioneta negra o de color oscuro de modelo más reciente. Dos sospechosos presuntamente implicados en el incidente vestían ropa oscura.
El tiroteo se produjo en “una fracción de minuto”, dijo la policía, añadiendo que los agentes no creen que hubiera un intercambio de disparos.
En la actualización del lunes, Campbell declaro que un joven de 14 años fue detenido durante una investigación sobre un vehículo robado. Según la policía, la camioneta robada colisionó con un vehículo aparcado vacío en la misma zona en la madrugada del 3 de junio.
Al parecer, el chico intentó huir, pero fue detenido tras una breve persecución a pie. Tras investigar, la policía alegó que el chico era uno de los sospechosos del tiroteo y fue acusado de dos cargos de asesinato en primer grado y siete de intento de asesinato.
El motivo del tiroteo sigue sin estar claro, pero la investigación sigue en curso.