El miembro del parlamento Tony Clement fue aplaudido en una demostración política en Mississauga cuando anunció su candidatura para convertirse en el líder federal de los conservadores el martes.
Clement propone llevar a la cárcel de inmediato a las personas que estén en riesgo de cometer actos terroristas si no pueden ser supervisadas las 24 horas del día.
“Estas personas son tan peligrosas para la población canadiense que merecen estar en la cárcel a menos de que podamos vigilarlos las 24 horas del día”, afirmó el candidato ante los medios.
Esto proviene de las críticas a cerca de la libertad bajo la promesa de buen comportamiento que se les ha provisto a algunos sospechosos de terrorismo.
Sin embargo, el gobernó liberal afirma que está buscando formas de que la libertad bajo condiciones sea más efectiva y no cree que meter a sospechosos a la cárcel sea ético.
El Ministro de Salud Pública del partido al mando del país afirmó que una mejor medida podría incluir llevar a cabo programas de anti-radicalización psicológicos para las personas en esta lista.
Clement reveló su posición cuando conversaba acerca de su plan para la seguridad nacional que espera proteger al país de amenazas terroristas en Canadá y el exterior.
El miembro del parlamento indicó que el terrorismo está escalando y que quienes han sido radicalizados deben ser llevados a la cárcel antes de que radicalicen a otras personas.
Clement espera que las caridades que trabajan con inmigrantes que llegan al país sean vigiladas también para identificar a posibles terroristas.
En las entrevistas con los medios Clement se dedicó a decir que la amenaza terrorista está aumentando y la siguió relacionando con los inmigrantes.
Recordando a Donald Trump en Estados Unidos, se puede ver que este tipo de argumentos están en aumento alrededor del mundo y hacen muy populares a los políticos.
El gobierno liberal canadiense está haciendo lo posible por reversar dichos argumentos que incluso se convirtieron alguna vez en leyes durante el gobierno de Stephen Harper, el antiguo Primer Ministro.
Los críticos de este tipo de políticas afirman que esto no es algo que los canadienses quieran ver implementado en la ley de su país, y algunos opositores políticos afirmaron que una ley así iría en contra de los valores del país.
Sin embargo, en una nueva encuesta publicada el lunes por el Toronto Star, se vio que dos tercios de los canadienses quieren que los inmigrantes sean examinados e interrogados para asegurarse de que no tengan valores “anti-canadienses”.
El 87 por ciento de los conservadores apoyan estas interrogaciones, mientras el 57 por ciento de los liberales y el 59 por ciento los nuevos demócratas las apoyan.