Los solicitantes de inmigración canadiense disponen ahora de más tiempo para solicitar la revisión judicial.
El Tribunal Federal de Canadá ha adoptado medidas especiales que conceden a los solicitantes 45 días adicionales para solicitar autorización judicial para revisar las decisiones en materia de inmigración. Antes de estas nuevas medidas, los solicitantes solo disponían de 30 días.
Cuando un solicitante obtiene un permiso para la revisión judicial, un tribunal federal canadiense revisa la decisión del departamento de inmigración y puede tomar medidas como devolver una solicitud rechazada para su tramitación si fue rechazada por un malentendido o un error de derecho.
El tribunal dictó estas medidas especiales el pasado 14 de mayo del 2025. Este cambio se ha introducido en respuesta al creciente número de solicitudes de permiso y revisión judicial acumuladas a lo largo del 2024 y del 2025.
El proceso de revisión de una decisión de inmigración por parte del Tribunal Federal suele constar de dos fases: la fase de permiso judicial y la fase de revisión judicial. Con los nuevos cambios, los solicitantes dispondrán ahora de 45 días adicionales para revisar su solicitud de permiso.
Esto significa que, tras presentar su solicitud inicial de permiso, los solicitantes dispondrán ahora de 75 días a partir de la presentación de su solicitud inicial para hacer una revisión final de su solicitud y presentar el expediente completo del solicitante para que el tribunal lo examine.
Después de presentar su solicitud al demandado (la parte que tomó la decisión sobre su solicitud de inmigración), debe presentar una prueba de que lo ha hecho. Esto debe hacerse en un plazo de 10 días a partir de la fecha de presentación de su solicitud inicial.
El demandado debe presentar un aviso indicando que participará en el caso. Esto debe hacerse en un plazo de 10 días a partir de la notificación de su solicitud.
Si la decisión que usted impugna no fue acompañada inicialmente de los motivos de denegación por escrito, el tribunal los solicitará a la parte administrativa, denominada formalmente “tribunal”. El tribunal debe enviar los motivos por escrito a todas las partes implicadas o notificarles que no existen motivos.
Si el Tribunal Federal está de acuerdo con la decisión original y no encuentra ningún error jurídico, se mantendrá la decisión inicial.
Pero si el Tribunal Federal devuelve su caso a la parte que tomó la decisión, este será revisado de nuevo. Sin embargo, esto no garantiza que se modifique la decisión original.











