Rodrigo Díaz M.
Esta semana fue la Semana Nacional de la Vivienda, un momento para reconocer el trabajo vital realizado por los socios de la vivienda para mejorar el acceso a una vivienda segura, adecuada y asequible para todos.
El Ayuntamiento de Toronto organizó y apoyó varios actos en toda la ciudad que hacen hincapié en la necesidad de crear y conservar viviendas para todos.
Toronto se enfrenta a continuas crisis de vivienda y de personas sin hogar, como la falta de viviendas asequibles y de apoyo para los residentes con rentas bajas y marginados, y el aumento de los alquileres, que los hacen cada vez más inasequibles para las rentas medias.
En la actualidad, la ciudad ofrece alojamiento a más de 12 mil personas sin hogar, y hay casi 93 mil solicitantes en lista de espera para acceder a viviendas sociales. Además, la disponibilidad de viviendas de alquiler asequible está muy por debajo de los niveles recomendados para un sistema de vivienda saludable. Existe una necesidad urgente de ofrecer soluciones de vivienda con efectos a largo plazo.
El Ayuntamiento está tomando medidas para responder a esta necesidad y transformar el sistema de vivienda a través de políticas innovadoras y audaces soluciones made-in-Toronto, entre las que se incluyen:
– Transformar el sistema de vivienda para aumentar la oferta de viviendas de alquiler asequible y de viviendas de alquiler construidas expresamente, incluidas las viviendas gestionadas por cooperativas, organizaciones sin ánimo de lucro y proveedores de viviendas indígenas.
– Trabajar con otros órdenes de gobierno para aumentar la oferta de viviendas asequibles y solidarias.
– Mejorar la estabilidad de la vivienda de los inquilinos y evitar los desahucios y proteger la oferta existente de viviendas asequibles para que sigan siendo asequibles, seguras y estén en buen estado.
– Reforzar la divulgación y el apoyo a las personas sin hogar e invertir en infraestructuras de alojamiento
– Regular los alquileres de corta duración para proteger el parque de alquileres críticos manteniendo el acceso de los inquilinos a alojamientos de larga duración.
– Mejorar los procesos y tecnologías de revisión del desarrollo para acelerar la creación de viviendas, especialmente las asequibles, y garantizar que las viviendas de Toronto se construyan dentro de comunidades completas.
– Animar a los propietarios de casas y condominios vacíos a ponerlos a disposición para ser habitados, a través del programa Vacant Home Tax. Los ingresos recaudados con este programa se invierten en iniciativas de vivienda asequible que aumentan o preservan la oferta de viviendas.