Rodrigo Díaz M.
El gobierno provincial tiene previsto presentar el mes que viene una ley para restringir los carriles bici en las calles de las ciudades.
La legislación, que se presentará en octubre, se centrará en impedir la introducción de carriles para bicicletas en sustitución de los carriles para vehículos en las carreteras.
En los últimos meses, Toronto ha sufrido una importante congestión de tráfico, y las obras en curso en la Gardiner Expressway han sido especialmente problemáticas para los conductores que intentan circular por la ciudad.
La alcaldesa Olivia Chow, ávida ciclista, aboga desde hace tiempo por la implantación de más carriles para bicicletas en las calles de la ciudad. En junio, el ayuntamiento de Toronto aprobó varios kilómetros de nuevos carriles a pesar de la oposición de los candidatos a la alcaldía, como el ex jefe de policía de Toronto Mark Saunders.
Se trataba de cerca de 8,6 kilómetros de carriles para ciclistas, sobre todo en un tramo de Bloor Street West desde Runnymede Road hasta el este de Kipling Avenue. En mayo, la ciudad estaba en vías de entregar 75 kilómetros a finales de este año.
La alcaldesa Chow dijo que está dispuesta a trabajar con la provincia para “buscar formas de mejorarlo”.
Desde el 2018 y hasta el 2022, se instalaron más de 96 kilómetros de nuevos carriles para bicicletas en Toronto. Solo en 2022, se instalaron 18 kilómetros y se mejoraron 21 kilómetros.
Ciclistas, mientras tanto, han pedido medidas para mejorar la seguridad en las calles de Toronto después de numerosas muertes y bicicletas atropelladas por conductores.
El Ayuntamiento también votó a favor de duplicar el número de cámaras de control de velocidad en Toronto de 75 a 150 para el 2026.