El clima invernal y el césped canadiense equivalen a una renovación primaveral. Un cuidado adecuado a medida que se acerca el buen tiempo devolverá la vida a su espacio verde. Aquí tiene unos sencillos consejos para que su césped sea el mejor de la cuadra esta primavera.
Limpie
Fuera lo viejo, dentro lo nuevo. Recoja y deseche todo el follaje viejo y muerto y los restos que hayan aparecido en su jardín durante el invierno para que haya espacio fresco para crecer.
Airee la tierra
Airear significa hacer agujeros en el césped para que el agua, el aire y los nutrientes lleguen a las raíces. Lo mejor es airear cuando el césped está en plena temporada de crecimiento para que se recupere rápidamente (a principios de primavera). Si tiene zonas muy transitadas o un suelo muy arcilloso, deberá airearlo todos los años. Si el suelo es arenoso o el césped crece bien, puede airearlo cada dos o tres años.
Deshierbe
La paja es una capa de hierba viva y muerta, tallos y raíces que se forma entre la hierba verde y la superficie del suelo. Parte de la paja es útil: conservar la humedad del suelo, amortigua el césped y aísla la tierra de las temperaturas extremas. Pero demasiada paja puede repeler el agua, secar las raíces y dar cobijo a insectos no deseados. Si la capa de paja supera los dos centímetros (tres cuartos de pulgada) de grosor, es hora de eliminar la paja del césped.
Siembre en exceso
Una siembra extra puede reparar las zonas desnudas y crear un césped espeso que ahuyente las malas hierbas, los insectos y las enfermedades. El mejor momento para sembrar el césped es entre mediados de abril y mediados de mayo. Compre semillas de césped adecuadas para las condiciones de cultivo, como una mezcla polivalente para un césped que reciba una cantidad adecuada de sol.
Riegue con frecuencia
Por último, las semillas de césped necesitan luz solar directa y humedad regular para empezar a brotar, lo que puede tardar hasta tres semanas. Vigile y riegue las semillas a diario, asegurándose de que estén húmedas, pero no mojadas.
Una vez que empiece a ver que la semilla empieza a brotar, reduzca el riego. Riegue el césped nuevo y el ya establecido a primera hora de la mañana para evitar la pérdida de humedad por evaporación. Asimismo, evite regar por la noche, ya que es probable que el césped permanezca húmedo y se cree un entorno ideal para las enfermedades.
-News Canada