Rodrigo Diaz M.
Estados Unidos ha registrado cinco casos de paludismo o malaria transmitido por mosquitos en los dos últimos meses, la primera vez que se produce un contagio local en 20 años.
Se han detectado cuatro casos en Florida y uno en Texas, según una alerta sanitaria emitida el lunes por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
La malaria está causada por un parásito que se propaga a través de las picaduras de mosquitos. Las personas infectadas pueden sufrir fiebre, escalofríos y un cuadro gripal. Si no se trata, las personas infectadas pueden desarrollar complicaciones graves y morir. El mayor número de muertes en los últimos años se ha registrado en niños del África subsahariana.
Las autoridades sanitarias advierten a los médicos, especialmente a los de los estados del sur, donde el clima es más favorable al mosquito tropical que propaga el paludismo, que sean conscientes de la posibilidad de infección. También deben pensar en cómo acceder al fármaco intravenoso que es el tratamiento de primera línea para la malaria grave en Estados Unidos, señalaron los CDC.
La agencia dijo que las personas diagnosticadas recibieron tratamiento y “están mejorando”.
Cada año se diagnostican unos dos mil casos de paludismo en los Estados Unidos, la gran mayoría en viajeros procedentes de países donde la malaria se propaga con frecuencia.
Desde 1992, se han producido 11 brotes de paludismo por mosquitos en los Estados Unidos. El último tuvo lugar en el 2003 en el condado de Palm Beach (Florida), donde se registraron ocho casos.