Rodrigo Díaz M.
La Casa Blanca repartió el lunes 42 billones de dólares entre los 50 estados y territorios del país para universalizar el acceso de internet de banda ancha de alta velocidad para el 2030, al tiempo que lanzaba una nueva campaña publicitaria de las políticas económicas del presidente Joe Biden.
La financiación con cargo al Programa de Acceso y Despliegue Equitativo de la Banda Ancha fue autorizada por la ley de infraestructuras del 2021, dotada con un billón de dólares y defendida por Biden. El gasto se basará en un mapa de cobertura de la Comisión Federal de Comunicaciones publicado recientemente en el que se detallan las deficiencias de acceso.
Texas y California, los dos estados más poblados de los Estados Unidos, encabezan la lista de financiación con 3.1 y 1.9 billones de dólares, respectivamente. Pero otros estados menos poblados, como Virginia, Alabama y Luisiana, se cuelan en la lista de los 10 más financiados por falta de acceso a la banda ancha. Estos estados tienen amplias zonas rurales con menos conectividad a Internet que sus principales ciudades.
“Es la mayor inversión en Internet de alta velocidad de la historia. Porque para que la economía actual funcione para todos, el acceso a Internet es tan importante como la electricidad, o el agua, u otros servicios básicos”, dijo Biden en un discurso en la Casa Blanca el lunes.
Las subvenciones van desde los 27 millones de dólares para territorios de los Estados Unidos, como las Islas Vírgenes, hasta los más de 3.300 millones de dólares para Texas, y cada estado recibirá un mínimo de 107 millones de dólares.
La administración de los Estados Unidos calcula que unas 8,5 millones localidades carecen de acceso a conexiones de banda ancha.
Compañías de banda ancha como Verizon. Comcast, Charter Communications y AT&T se han mostrado reacias a proporcionar acceso a comunidades rurales poco pobladas porque las inversiones son caras y las regiones no ofrecen muchos abonados. La falta de acceso de banda ancha llamó la atención durante los cierres debido al COVID-19, que obligaron a los alumnos a realizar sus actividades escolares en línea.
Se espera que, a finales de este año, se presenten los planes iniciales que desbloquearán el 20% de la financiación. Una vez finalizados los planes, lo que podría tardar hasta el 2025, el gobierno liberará el dinero restante.