Rodrigo Díaz M.
Estados Unidos, México y Canadá se comprometieron ayer a estrechar sus lazos económicos, producir más bienes a nivel regional e impulsar la producción de semiconductores, a pesar de que la integración se ve obstaculizada por una disputa en curso sobre las políticas energéticas nacionalistas de México.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, se reunieron ayer en Ciudad de México en la cumbre de los países de Norte América, tildada los “Tres Amigos”.
López Obrador dijo que México ayudaría a Biden a tomar medidas drásticas contra el comercio del opioide sintético fentanilo, al que se atribuyen miles de muertes en Estados Unidos, mientras los líderes también prometieron reducir la huella de carbono de sus países y hacer frente a la inflación.
“Estamos trabajando hacia un futuro para fortalecer nuestra cooperación en las cadenas de suministro y minerales críticos para que podamos seguir acelerando nuestros esfuerzos para construir las tecnologías del futuro aquí mismo en América del Norte”, dijo Biden en una conferencia de prensa conjunta con sus colegas líderes después de su reunión.
López Obrador aseguró que la región promovería el desarrollo económico mediante la creación de un comité de sustitución de importaciones para que América del Norte dependa menos de otras partes del mundo.
La Casa Blanca informó que los tres países mejorarían las vías legales para los migrantes, y López Obrador instó de nuevo a Biden a presionar al Congreso para que promulgue medidas que regularicen la situación migratoria de millones de mexicanos en los Estados Unidos.
Estados Unidos dijo que la región organizaría a principios de 2023 un foro de producción de semiconductores para aumentar la inversión en la estratégica industria de alta tecnología dominada por Asia.
Según la Casa Blanca, será necesaria la coordinación en el mapeo de la cadena de suministro de semiconductores para identificar las necesidades y oportunidades de inversión en la fabricación de chips que se utilizan en todos los sectores tecnológicos, desde las telecomunicaciones hasta la fabricación de automóviles y la defensa.
Las esperanzas de México de beneficiarse del impulso a la producción de semiconductores se han visto socavadas por el conflicto energético, ya que Washington y Ottawa iniciaron en julio un procedimiento formal de solución de diferencias contra las políticas de México.
El conflicto, que se centra en los esfuerzos de México por dar prioridad a sus empresas energéticas estatales, con problemas de liquidez, en detrimento de los inversores privados, se siguió de cerca en la cumbre, pero los líderes no dieron detalles al respecto en la conferencia de prensa luego de la reunión.
El ministro mexicano de asuntos exteriores, Marcelo Ebrard, había sugerido que la energía no ocuparía un lugar destacado en las conversaciones del martes, señalando que estaba en marcha un proceso de resolución y que los tres líderes no querían convertir la cumbre en un panel de disputas.
“No creo que sea un tema importante en la cumbre”, dijo a la radio mexicana, al tiempo que señaló que era probable que Trudeau planteara la cuestión en conversaciones separadas con López Obrador.
Biden y Trudeau se reunieron más temprano el ayer, y el líder estadounidense dijo que visitaría Canadá en marzo. Al comenzar su reunión, Biden dijo que la región debe aspirar a ser “la potencia de energía limpia del mundo”, e hizo hincapié en “reforzar nuestras cadenas de suministro para que nadie pueda retrasarnos arbitrariamente”.
En el marco del Diálogo sobre Drogas en América del Norte (NADD), los tres países adoptarán un “marco estratégico actualizado” para hacer frente a las amenazas que plantean los estupefacientes prohibidos, según la Casa Blanca. Esto incluiría un mayor intercambio de información sobre los productos químicos utilizados para fabricar drogas, incluido el fentanilo.
La Casa Blanca declaró asimismo que los tres países se comprometían a reducir las emisiones de metano procedentes de residuos sólidos y aguas residuales en al menos un 15% para el 2030 con respecto a los niveles del 2020.
Asimismo, crearán una plataforma virtual para facilitar a los inmigrantes el acceso y la información sobre las formas legales de entrar en México, Estados Unidos y Canadá.