Rodrigo Díaz M.
La NASA consiguió finalmente que el primer cohete de su misión Artemis despegara.
El cohete despegó a la 1:47 AM del lunes, iluminando el cielo de la madrugada en Cabo Cañaveral, Florida.
“Hoy hemos sido testigos de cómo el cohete más potente ha salido a la luna”, dijo el director de la misión Artemis, Mike Sarafin, en una sesión informativa posterior al lanzamiento. “Y fue todo un espectáculo”.
Pero no estuvo exento de problemas.
Después de haber repostado con éxito el oxígeno y el hidrógeno líquidos en su cohete principal, que tuvo problemas en su primer intento de lanzamiento en agosto y a principios de septiembre, este volvió a tener un problema con el hidrógeno líquido, esta vez en su segunda etapa, llamada Sistema de Propulsión Criogénica Provisional.
La NASA ya había encontrado una fuga de hidrógeno líquido durante sus dos primeros intentos de lanzamiento. En este intento de lanzamiento se solucionó el problema inicial. Sin embargo, durante la carga de propulsor de su segunda etapa, que lleva a la cápsula Orión destinada a la Luna a su órbita deseada, se detectó otra fuga.
Se envió una tripulación a la plataforma, un trabajo peligroso con un cohete cargado de combustible, para solucionar el problema, que a la final funcionó.
Pero una vez más, hubo otro problema. Esta vez con un cable ethernet del campo de tiro, que controla la seguridad en la zona de lanzamiento y sus alrededores. Pero al final también lo solucionaron.
El Sistema de Lanzamiento Espacial, el cohete en sí, es el cohete más potente jamás construido por la agencia espacial. Sobre él se asienta la nave espacial Orión, que algún día transportará a los astronautas hacia y desde la Luna. La última vez que hubo humanos en la Luna fue en diciembre de 1972.
Aunque el cohete funcionó, este es sólo el comienzo de la misión: Orión ha completado con éxito su inyección translunar, lo que la sitúa en su camino hacia la Luna. Ahora comienza la misión de 26 días, en la que se probarán múltiples sistemas, entre ellos, el más importante, un nuevo escudo térmico diseñado para proteger a los astronautas del calor al volver a entrar en la atmósfera a casi 40 mil kilómetros por hora.
Se trata de una misión sin tripulación, en la que los únicos pasajeros son tres maniquíes a bordo que forman parte de algunos experimentos, entre ellos la prueba de un chaleco que protegerá a los astronautas de la radiación espacial letal.
Artemis II, cuyo lanzamiento está previsto para 2024, llevará a cuatro astronautas, entre ellos un canadiense, que orbitarán la Luna y regresarán a la Tierra.
Artemis III, cuyo lanzamiento está previsto para 2025, permitirá que los seres humanos vuelvan a pisar la superficie de la Luna.