Rodrigo Díaz M.
El primer ministro Justin Trudeau anunció que el gobierno federal está creando un “fondo de recuperación del huracán Fiona” de 300 millones de dólares para ayudar a los canadienses del Atlántico a recuperarse tras la mortal y destructiva tormenta post-tropical.
Como consecuencia de las mareas de tempestad y los fuertes vientos de la que se ha considerado una de las tormentas más fuertes que han tocado tierra en Canadá, varias viviendas fueron arrastradas por el mar. Empresas, puentes, aeropuertos y otras infraestructuras también sufrieron graves daños.
“Esta financiación apoyará proyectos para reparar y reconstruir infraestructuras críticas dañadas por la tormenta, como los muelles, apoyar la limpieza de las artes de pesca para que los barcos y la vida marina puedan volver a navegar con seguridad por estas aguas y, por supuesto, ayudar a las empresas y comunidades locales a reconstruir y recuperarse”, dijo Trudeau.
El fondo proporcionará “hasta 300 millones de dólares adicionales a lo largo de dos años, a partir de este año”, según el gobierno, y el dinero se administrará a través de la Agencia de Oportunidades del Canadá Atlántico (ACOA) en coordinación con la Agencia de Desarrollo Económico de Canadá para las Regiones de Quebec (CED), así como con otros departamentos relacionados.
El gobierno federal aún no ha anunciado los detalles de cómo se asignarán estos fondos, aparte de que la ministra responsable de la ACOA, Ginette Petitpas Taylor, dijo que, aunque aún quedan algunos detalles por concretar, “el dinero se va a distribuir muy rápidamente”.
En el marco de los Acuerdos de Asistencia Financiera para Catástrofes (DFAA) preexistentes del Gobierno federal, se cubre hasta el 90% de los gastos provinciales subvencionables tras una catástrofe, como el transporte, los alimentos y el alojamiento de emergencia, y la sustitución de los bienes no asegurables.
Este anuncio se produce cuando todavía hay miles de habitantes de la costa siguen sin electricidad, más de dos semanas después de que Fiona golpeara la región.
Alrededor de 850 miembros de las Fuerzas Armadas canadienses se encuentran en el Atlántico canadiense ayudando en las tareas de limpieza, en el restablecimiento del suministro eléctrico y en los controles de bienestar.
El gobierno federal se ha comprometido previamente a igualar todas las donaciones relacionadas con el huracán Fiona que se hagan a la Cruz Roja Canadiense hasta finales de mes, y ha ofrecido algún alivio en el plazo de los impuestos a los afectados.
El líder del NDP, Jagmeet Singh, pidió a los liberales que eximieran a los trabajadores del Atlántico de las normas del Seguro de Empleo, como se hizo en British Columbia durante las inundaciones extremas del año pasado.
Singh envió una carta a Trudeau pidiéndolo, afirmando que, dado que muchos canadienses no pueden trabajar debido a que las empresas y los hogares están sin electricidad, el gobierno federal debería ofrecer algún tipo de ayuda salarial de emergencia.
