Los demócratas han logrado poner fin esta noche a ocho años de mayoría republicana en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, una victoria que vaticinaban las encuestas y que, a falta de conocer su holgura, supone un freno al presidente, Donald Trump, para aprobar polémicos proyectos como el muro o la liquidación de la reforma sanitaria en el Congreso, pese a que los republicanos mantendrían el control del Sen
Los demócratas han vencido en la Cámara Baja logrando al menos los 23 asientos que necesitaban arrebatar a los conservadores para hacerse con la mayoría, un número que podría ampliarse hasta en otros 10 escaños. Los comicios, caracterizados por una alta participación, dibujan un Congreso con más mujeres y más diversidad racial y religiosa que nunca.