Rodrigo Díaz M.
Los inspectores de la Autoridad de Normas Técnicas y Seguridad (TSSA) siguen en huelga tras la ruptura de las negociaciones contractuales.
La preocupación aumenta antes de la Exposición Nacional de Canadá (CNE) en Toronto, ya que muchos de estos inspectores se encargan de la seguridad y la supervisión de las licencias de las atracciones de los parques de atracciones.
Estos empleados son los mismos que realizan las inspecciones de seguridad y garantizan el cumplimiento de las normas en las atracciones de los parques de atracciones, los ascensores, los remontes mecánicos y los camiones de comida, pero también vigilan e inspeccionan los equipos de combustión, las gasolineras y las centrales nucleares.
El CNE y otros parques de atracciones de la provincia se someten a estrictos requisitos de seguridad y licencia, además de a inspecciones diarias por parte de un mecánico certificado por la TSSA.
La CNE dijo que era “consciente de las negociaciones contractuales en curso”.
“Todos los años las atracciones y las instalaciones de comida del CNE son inspeccionadas por las autoridades reguladoras antes y durante los 18 días de la Feria”, dijo un portavoz. “La dirección de la TSSA ha tomado medidas proactivas, como viajar a otros lugares de la feria para realizar inspecciones antes de la llegada de los equipos a la CNE”.
Mientras tanto, los propietarios y operadores de atracciones y dispositivos también están obligados a tener un seguro, según Kathryn Woodcock, profesora de la Universidad Metropolitana de Toronto especializada en seguridad e ingeniería de atracciones de parques de atracciones.
“A pesar de la huelga, si un cliente ve un dispositivo que considera inseguro o que no funciona correctamente, puede denunciarlo a la TSSA. El organismo no está cerrado. Son los inspectores del sindicato los que no están disponibles”.
El sindicato mantiene que sus miembros quieren volver al trabajo, pero quieren ver un acuerdo justo y mantiene que seguirá de huelga para arrojar luz sobre el conflicto en curso hasta que ambas partes vuelvan a la mesa de negociación.
A pesar de esta situación, desde la organización de la CNE aseguran que las tracciones son seguras. Pero sin la revisión apropiada, la apertura al público de las mismas se consideraría como ilegal.