Rodrigo Díaz M.
El gobierno de Quebec se dispone a aumentar el importe que cobra a los usuarios comerciales del agua, en lo que equivale a una promesa de campaña anticipada meses antes de las próximas elecciones.
Se espera que el ministro de medio ambiente, Benoit Charette, presente pronto una propuesta de ley que aumentaría los impuestos cobrados a los usuarios comerciales de agua.
Hay pocos detalles sobre la próxima legislación, de la que informó por primera vez el lunes La Presse y que luego confirmó Radio-Canadá.
Este proyecto no tiene prácticamente ninguna posibilidad de convertirse en ley, dado que ésta es la última semana en la Asamblea Nacional antes de las vacaciones de verano, y las próximas elecciones provinciales están previstas para el 3 de octubre.
En la actualidad, la provincia cobra 70 dólares por millón de litros de agua consumida a una categoría de industrias, entre las que se encuentran las empresas de agua embotellada.
Otra categoría de usuarios, que incluye las fábricas de pasta y papel, las minas y las fundiciones de aluminio, sólo paga 2,50 dólares por millón de litros. En total, la provincia sólo ingresó 2,8 millones de dólares el año pasado por el consumo de 811 billones de litros de agua, según los documentos presupuestarios.
Los impuestos de Quebec por el uso comercial del agua son muy inferiores a los de Ontario, que elevó la tasa que se cobra a las empresas de agua embotellada a más de 500 dólares por millón de litros en 2017.
Los países europeos cobran mucho más. Dinamarca, por ejemplo, cobra 10 mil dólares por millón de litros.
Las tasas en Quebec no se han incrementado desde 2010.
Philippe Duhamel, portavoz del grupo ecologista Eau Secours, dijo que la medida “huele a política electoral”, dado que el gobierno de la Coalición Avenir Québec (CAQ) se resistió a aumentar la tasa durante los últimos cuatro años.
Quebec tiene aproximadamente el 3% del agua dulce del mundo, pero los ecologistas advierten que el recurso está sometido a una presión cada vez mayor, sobre todo en el sur de Quebec.
Eau Secours también está presionando a la provincia para que obligue a las empresas de agua embotellada a hacer pública la cantidad de agua que extraen del suelo.