— “Aunque la flacidez suele aparecer a partir de los 35 a 40 años, la genética, los cambios bruscos de peso y los malos hábitos alimenticios y de salud pueden provocar que a cualquier edad nuestros glúteos no estén tan tersos y firmes” señala a Efe Myriam Yébenes directora del Instituto Maribel Yébenes.
— “Las clásicas sentadillas son muy efectivas para conseguir un efecto de “empuje hacia arriba” , y hay diversas variantes, como las de una sola pierna, la búlgara o con lasto, que hacen este ejercicio más ameno”, señala Yébenes, autora del libro ‘cómo gustarte y gustar. Mis secretos de belleza’.
— “Otra forma de trabajar los glúteos, casi sin darse cuenta, consiste en subir escaleras”, señala Myriam Yébenes, que sugiere subir y bajar un promedio de 500 escalones diarios y olvidarse de los ascensores y de las escaleras mecánicas.
Los glúteos son una de las zonas más críticas para las mujeres, ya que con la edad o la falta de cuidados, la retaguardia femenina pasa de ser sexy a flácida.
“La flacidez corporal y especialmente la de los glúteos es uno de los problemas corporales que, antes o después, nos preocupa a todas”, señala a Efe Myriam Yébenes directora del Instituto que fundó su madre, Maribel Yébenes
( http://maribelyebenes.com/myriam-g-yebenes).
“Aunque la flacidez suele aparecer a partir de los 35 a 40 años, muchas otras causas pueden provocar que, a cualquier edad, nuestros glúteos no estén tan tersos y firmes como quisiéramos: la genética, los cambios bruscos de peso y los malos hábitos alimenticios y de salud, entre otros”, señala Yébenes, autora del libro ‘cómo gustarte y gustar. Mis secretos de belleza’.
Además, “el sedentarismo de la vida actual tiene como resultado el descuido de la tonificación de los músculos de los glúteos, el aumento de la acumulación de grasas en esa zona y la aparición de la celulitis”, asegura la experta.
Yébenes traslada a Efe unos ejercicios y consejos para lucir unos glúteos bonitos.
TIPOS DE SENTADILLAS PARA HACER EN CASA.
“Las clásicas sentadillas son tremendamente efectivas para conseguir un efecto “push-up” (empuje hacia arriba) así como evitar la flacidez de los glúteos, y hay diversas variantes que hacen que este ejercicio sea más ameno”, señala la especialista.
1.- Sentadilla de una sola pierna. “Se trata de mantener en el aire una pierna estirada, mientras la otra está flexionada, sosteniéndose en equilibrio y realizando subidas y bajadas”, explica Yébenes.
2.- Sentadilla búlgara. “Se necesita un apoyo para colocar un pie y realizar la sentadilla con el otro y también hay que mantener el equilibrio, subiendo y bajando”, describe esta experta.
3.- Sentadilla con salto. “Partiendo de la posición normal, se ejecuta un salto, de manera que el cuerpo se extienda totalmente, y después quede en posición de sentadilla con las piernas flexionadas. Eso sí: hay que realizarlo correctamente para no lesionarse las rodillas”, señala Yébenes.
‘FITBALL’: UN BALÓN PARA JUGAR EJERCITÁNDOSE.
“El “fitball” es una excelente herramienta para ejercitar los glúteos en casa debiendo practicarlos, al menos, tres o cuatro veces a la semana”, indica Yébenes.
Algunos ejercicios:.
– Tumbada boca arriba y con la espalda en el suelo. “Coloque los pies sobre el “fitball”, estirando piernas y elevando la zona lumbar y los glúteos. Al encoger y estirar las piernas mientras mantienes los pies en el balón, contraiga los glúteos. Puede mantener unos segundos esta posición para intensificar más el ejercicio, realizando tres sesiones de veinte repeticiones”, señala.
– Subiendo el nivel de dificultad . “Apoye la espalda en el “fitball” con los pies en el suelo y las rodillas dobladas, eleve cada pierna y contraiga los glúteos, mientras la pierna está arriba. Para añadirle un plus, mientras eleva la pierna puede subir el tronco para trabajar el abdomen”, explica Yébenes que sugiere efectuar tres sesiones de veinte repeticiones de este ejercicio con cada pierna.
– Manteniendo el equilibrio. “Boca abajo, con el abdomen sobre el “fitball” y apoyando las manos en el suelo, despegue las piernas del suelo y realice elevaciones con cada pierna, efectuando tres sesiones de veinte repeticiones con cada pierna”, aconseja.
SUBA ESCALERAS SIEMPRE QUE PUEDA.
Otra forma de trabajar los glúteos, casi sin darnos cuenta, y que fortalece mucho los músculos de esta zona, consiste en subir escaleras, según Yébenes.
“Sugiero realizar diariamente un trabajo con la escalera subiendo y bajando en promedio 500 escalones diarios. Para introducir este ejercicio en nuestra vida cotidiana es bueno olvidarse de los ascensores y de las escaleras mecánicas”, recalca.
CONTRACCIONES PARA REALIZAR EN LA SILLA.
Yébenes recomienda un ejercicio para las personas que se pasan muchas horas sentadas en el trabajo, con la consecuencia de piernas hinchadas y dolor de espalda.
“Realice contracciones de glúteos mientras está sentada o incluso de pie. Es fácil, pero hay que acordarse de hacerlo para lo cual puede ser útil dejar un ‘pósit’ en la mesa y así, cada día, podremos dedicarle unos minutos a este ejercicio”, señala.
“Las flexiones de glúteos se pueden hacer en cualquier momento, ya sea sentada o de pie. Es un ejercicio muy sencillo, simplemente se debe contraer y liberar los músculos de los glúteos repetidamente y de forma continua en varios momentos del día, lo cual puede hacerse rápida o lentamente”, añade.
Otras dos medidas que sumadas al ejercicio y la alimentación sana pueden ayudar a mejorar la retaguardia, según Myriam Yébenes son la aplicación de cremas anticelulíticas y de la técnica de la cavitación.
Para potenciar el efecto de la crema anticelulítica sobre los glúteos, Yébenes aconseja exfoliar la piel para eliminar las células muertas y dejarla preparada para recibir la crema.
La exfoliación puede llevarse a cabo en el momento de la ducha, y “después del baño es el mejor momento para aplicar la crema anticelulítica, pues los poros de la piel están más dilatados y se conseguirá una mayor absorción del producto”, señala.
“Para aplicarla, primero caliente la crema con las manos para favorecer su penetración, luego aplíquela realizando masajes circulares de forma enérgica hasta que se absorba por completo”, señala esta experta para quien agrega que “es muy importante ser constante y aplicar la crema diariamente, ya que de lo contrario el tratamiento perdería efectividad”.
“La cavitación es una técnica especialmente recomendable para aquellas personas que tienen acumulaciones de grasa en distintas zonas del cuerpo”, señala esta experta.
Explica que “es un tratamiento para esculpir el cuerpo sin cirugía basado en ultrasonidos que impactan en los nódulos de grasa, diluyéndolos y eliminando la grasa de las zonas localizadas” y añade que “los glúteos es una de las zonas en las que las mujeres tenemos tendencia a acumular”.
“Se necesitan varias sesiones de cavitación, aunque los resultados empiezan a ser evidentes desde la primera sesión, y existen otros tratamientos para mejorar la estética de los glúteos, como la radiofrecuencia, que produce una estimulación del colágeno y la elastina tersando los tejidos y es adecuada para quienes tienen la zona de sus glúteos caída o poco tersa”, concluye Yébenes.