Rodrigo Díaz M.
Los diplomáticos de Irán y las potencias mundiales volvieron a reunirse en Viena el martes para buscar un acuerdo que reviva el acuerdo nuclear de Teherán de 2015, con una presión creciente para que se obtengan resultados pronto.
Los negociadores de Irán y de las restantes partes del acuerdo (Gran Bretaña, Francia, Alemania, Rusia y China) volvieron a trabajar tras una pausa de poco más de una semana para regresar a sus capitales para realizar consultas.
Estados Unidos ha participado indirectamente en las conversaciones porque se retiró del acuerdo en 2018 bajo el mandato del entonces presidente estadounidense Donald Trump. El presidente Joe Biden ha señalado que quiere reincorporarse al acuerdo.
El acuerdo, conocido formalmente como el Plan de Acción Integral Conjunto, concedía a Irán un alivio de las sanciones a cambio de restricciones a su programa nuclear.
Bajo el mandato de Trump, Estados Unidos volvió a imponer fuertes sanciones a Irán, quien ha respondido aumentando la pureza y las cantidades de uranio que enriquece y almacena, incumpliendo el acuerdo.
Los funcionarios adelantaron que las conversaciones están llegando a su etapa final, aunque no está claro cuánto tiempo más podrían llevar. Las negociaciones se han prolongado durante meses, interrumpidas el año pasado por la llegada de un nuevo gobierno de línea dura a Irán. La actual octava ronda comenzó justo después de Navidad.
Los tres participantes de Europa Occidental llevan tiempo advirtiendo de que se está acabando el tiempo para que las conversaciones concluyan con éxito. Han argumentado que el acuerdo pronto perderá sentido a la luz de la intensificación del programa nuclear iraní.
Irán insiste en que su programa es pacífico.
El viernes, el secretario de Estado estadounidense Antony Blinken firmó varias exenciones de sanciones relacionadas con las actividades nucleares civiles de Irán. La medida revierte la decisión de la administración Trump de rescindirlas.
El ministro de Asuntos Exteriores de Irán celebró el sábado el alivio de las sanciones, pero lo calificó de insuficiente.
En Pekín, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Zhao Lijian, dijo el martes que las conversaciones están “actualmente en una coyuntura crucial”.
“Como culpable de la crisis nuclear iraní, Estados Unidos debería corregir a fondo su política errónea de máxima presión sobre Irán y levantar todas las sanciones ilegales a Irán y a terceros”, dijo Zhao. “Sobre esta base, la parte iraní debería reanudar el pleno cumplimiento del acuerdo”.