Rodrigo Díaz M.
Las farmacias de Ontario pronto tendrán la opción de ofrecer pruebas de detección del COVID-19 a las personas que presentan síntomas relacionados con el COVID-19.
Se trata de un cambio con respecto a la política anterior, que sólo permitía realizar las pruebas en una farmacia si una persona no mostraba ningún síntoma del virus.
En una conferencia de prensa celebrada hoy, el premier Doug Ford dijo que confía en que se establezcan protocolos para proteger a los clientes. Ford indicó que se mantienen las políticas del uso obligatoria de mascarillas y dijo que habrá filas exclusivas para las pruebas.
“Tenemos protocolos fuertes ya implementados, vamos a ser muy cautelosos”, dijo Ford.
En la actualidad, las farmacias sólo pueden realizar pruebas de COVID-19 a personas que no presenten síntomas, que no hayan estado en contacto con alguien con COVID-19 y que no formen parte de una investigación de un brote.
Las pruebas están destinadas principalmente a los residentes, trabajadores y visitantes de las residencias de cuidados a largo plazo, a los indígenas y a las personas que necesitan servicios médicos fuera del país.
De igual manera, las farmacias también podrán servir como puntos de entrega de pruebas a domicilio, si quieren participar en el programa.
Las farmacias deberán disponer de un espacio dedicado para realizar las pruebas, distanciamiento físico, tiempo entre pruebas para permitir la limpieza, y colocar carteles que indiquen que el lugar ofrece pruebas sintomáticas.