Rodrigo Díaz M.
El personal sanitario de los hogares de cuidados a largo plazo de Ontario debe haber recibido al menos su primera dosis de la vacuna contra el COVID-19 para poder ir a trabajar hoy.
Aquel empleado que no presente una prueba de haber recibido la primera dosis deberá mostrar una exención médica para poder entrar a trabajar en una residencia de cuidados a largo plazo.
Se había fijado hoy como fecha límite para que los trabajadores estuvieran completamente vacunados contra el virus, pero el ministerio de cuidados de largo plazo ha retrasado esa fecha al 13 de diciembre.
El cambio se habría hecho para dar cabida a las nuevas orientaciones sobre los intervalos de dosis de vacunas del Comité Consultivo Nacional de Inmunización.
Los últimos datos del gobierno mostraron que el 98% de los trabajadores de hogares de cuidados a largo plazo habían recibido al menos una dosis de la vacuna COVID-19.
El ministro de cuidados a largo plazo, Rod Phillips, anunció el mandato para todo el sector el mes pasado, diciendo que era necesario tomar más medidas para proteger a los residentes más vulnerables.