Rodrigo Díaz M.
Una nueva mutación, ligeramente más contagiosa, de la variante Delta del COVID-19, altamente transmisible, está volviendo a encender las alarmas, sobre en el Reino Unido, donde los casos están aumentando de nuevo.
La mutación, conocida como AY.4.2 o Delta Plus, representó el 6% de todos los nuevos casos secuenciados genéticamente durante la última semana de septiembre y, según los últimos datos del gobierno del Reino Unido esta descrita como “en expansión” en el país.
Public Health Canada confirmó hace algunas semanas que la mutación Delta Plus ya había llegado a Canadá, con 25 casos identificados desde julio.
Pero los expertos afirman que, aunque la mutación merece ser vigilada, aún no está claro si la AY.4.2 se convertirá en una variante preocupante como la cepa Delta original.
AY.4.2 es sólo la última mutación de COVID-19, cuya propagación ha dado lugar a miles de variantes y mutaciones a medida que el virus evoluciona para intentar sobrevivir.
Es una rama de la variante Delta y contiene dos mutaciones en su proteína de espiga, que permite al virus penetrar en las células sanguíneas humanas. Esas mutaciones, conocidas como Y145H y A222V, se han encontrado en otras variantes que se remontan a las primeras etapas de la pandemia.
Aunque los expertos han declarado que esas mutaciones de la proteína de la espiga no han provocado por sí mismas un aumento de la transmisibilidad en el pasado, admiten que la combinación con las propiedades de la variante Delta podría dar una ventaja a la AY.4.2.
“No sabemos realmente cuál es esa ventaja, y esperamos que no sea la de evadir el sistema inmunitario de los individuos totalmente vacunados”, dijo Stephen Hoption Cann, especialista en enfermedades infecciosas de la Universidad de British Columbia.
Francois Balloux, director del Instituto de Genética del University College de Londres, Inglaterra, ha estimado que la AY.4.2 podría ser hasta un 10% más transmisible que la variante original Delta.
Comparativamente, la variante Delta resultó ser dos veces más transmisible que la cepa original de COVID-19, por lo que Balloux predice que AY.4.2 “no tendría un impacto comparable en la pandemia”.
La Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido afirmó en un informe la semana pasada que la AY.4.2 está “aumentando en frecuencia” entre los casos recientes en Inglaterra desde que se descubrió por primera vez en julio. El informe se produce en un momento en el que los casos y las muertes vuelven a aumentar en el Reino Unido, que levantó todas las restricciones de salud pública restantes, incluidas las obligaciones de uso de mascarillas y de la vacunación.