Rodrigo Díaz M.
El tornado que arrasó el jueves pasado un vecindario de Barrie ha dejado 71 casas declaradas como inhabitables y 10 heridos.
Actualmente la limpieza de la zona continúa, con los funcionarios evaluando las casas dañadas, retirando los escombros de las calles y proporcionando ayuda a los residentes afectados.
El tornado afectó unas 150 viviendas a lo largo de una trayectoria de unos cinco kilómetros. En algunos puntos, la trayectoria tenía hasta 100 metros de ancho.
Algunas de las casas podrán reparadas a corto plazo, pero otras requerirán una reconstrucción casi total, según las autoridades.
Una de las carreteras de la zona, Prince William Way, ha sido reabierta al tráfico sólo para los residentes locales y los equipos de recuperación. El tornado se produjo en la zona de Mapleview Drive y Prince William Way.
Las empresas de servicios públicos, entre ellas Alectra Utilities y Enbridge Gas, están en el lugar reestableciendo los servicios eléctricos y de gas poco a poco.
La zona donde se produjo el tornado es actualmente una zona restringida y no se puede acceder a ella sin la debida identificación.
Autoridades de la ciudad de Barrie dijeron en un comunicado de prensa que están instando a los residentes que no viven en la zona restringida a permanecer lejos de las calles cerradas y la zona circundante, ya el tráfico adicional impide el trabajo de inspección.
La policía ha dicho que han presentado informes de personas que han intentado entrar en las casas dañadas en las que se han colocado avisos de inhabitabilidad.
“No es seguro y podrían resultar heridos o atrapados. Las casas que han sido calificadas como inseguras pueden tener grandes daños estructurales. Manténgase alejado de los edificios dañados hasta que puedan ser evaluados debidamente”, dijo la ciudad en el comunicado.
La escuela católica Saint Gabriel the Archangel, que se ha convertido en un centro de evacuación y la comunidad ha donado alimentos, ropa, artículos de aseo y pañales. De hecho, hubo tantas donaciones que se le tuvo que pedir al público que no donara más porque no había más espacio en el gimnasio de la escuela.
El viernes por la tarde, el premier de Ontario, Doug Ford, recorrió la zona devastada, agradeciendo a los equipos de emergencia, hablando con los residentes y viendo de primera mano los daños causados por el tornado.
Ford prometió a los residentes que la provincia ayudará a los afectados si las compañías de seguros no cubren el coste de las reparaciones requeridas.