Rodrigo Díaz M.
Los expertos afirman que Canadá podría sufrir un resurgimiento de los casos de COVID-19 aunque el país consiga vacunar completamente a la mayoría de su población.
El epidemiólogo de la Universidad de Saskatchewan, Nazeem Muhajarine, explicó que la posibilidad de que las variantes nuevas o existentes del COVID-19 se extiendan por Canadá podría provocar un posible resurgimiento de nuevos casos.
Como ejemplo, Muhajarine señaló la pequeña nación insular de África Oriental, Seychelles, que tenía al menos el 60% de su población totalmente vacunada con vacunas de Sinopharm o AstraZeneca.
La mayoría de la población de ese país ya había recibido dos vacunas, por lo que la nación insular decidió abrir sus fronteras al turismo, una industria de la que dependía en gran medida. Esa apertura, según Muhajarine, acabó provocando otra ola del virus “impulsada por las variantes”.
Entre las nuevas variantes del COVID-19, la variante B.1.1.7, que se originó por primera vez en el Reino Unido, se ha convertido en la variante dominante del virus en Canadá.
Las inyecciones de la vacuna de Pfizer-BioNTech han demostrado ser eficaces contra esa variante, según un estudio reciente, mientras que Moderna dijo en enero que su inyección parecía ser eficaz contra la variante del Reino Unido y la B.1.351 encontrada por primera vez en Sudáfrica.
Los casos de la variante B.1.351 y B.1.617, provenientes de la India, siguen propagándose en Canadá, aunque lentamente.
A pesar de ello, Muhajarine ha renovado su llamamiento a los gobiernos federales y provinciales para que vacunen al mayor número de personas posible y redoblen la vigilancia y las pruebas rápidas