Por Francisco Reyes
TORONTO. El alcalde John Tory es uno de los políticos más experimentados que ha tenido la ciudad de Toronto, marcado por una carrera de triunfos y aparentes fracasos en la vida política de esta provincia. Pero exitoso al ciento por ciento en el sector privado.
En la década de 1980 John Tory fue el principal secretario del premier Bill Davis y secretario asociado del gabinete de Ontario. En el sector privado había alcanzado la posición de gerente de una de las más grandes firmas de abogados de Canadá. Fue comisionado de la Liga de Football de Canadá y jefe oficial ejecutivo (CEO) de Rogers Communication.
Antes de ser alcalde de esta ciudad, sus adversarios habían intentado desacreditarlo diciendo de él que era un auténtico perdedor en política, tras haber sido derrotado por el alcalde David Miller en las elecciones municipales del 2003.
Su verdadera inserción en la política data del 2004 cuando fue elegido como líder del Partido Conservador Progresista de Ontario, pero no tenía escaño en la Legislatura provincial. En el 2005 ganó las elecciones parciales en el distrito electoral provincial de Dufferin-Peel-Wellington-Grey, convirtiéndose en Miembro del Parlamento Provincial (MPP) hasta el 2007, cuando perdió la candidatura a premier contra Dalton McGuinty, y obviamente, también fue derrotado en su distrito electoral, teniendo que abandonar el liderazgo de su partido, en el 2009.
Ciertamente, John Tory no había sido exitoso en el escenario político señalado más arriba, no obstante haber descollado como profesional.
En política nada está escrito sino determinado por las circunstancias. No quiere esto decir que a ellas se deben dejar los resultados que se busca obtener con un determinado proyecto político.
Las condiciones que se presentaron alrededor de las elecciones municipales del 2014 fueron favorables para que John Tory inscribiera su candidatura a alcalde de Toronto. El descrédito en que había caído el alcalde Rob Ford abrió un nuevo capítulo en la vida de Tory.
Tras la muerte del candidato Rob Ford, su hermano Doug ocupó el vacío, perdiendo las elecciones municipales del 27 de octubre del 2014. John Tory se coronó como alcalde de esta ciudad.
Al llegar a la alcaldía encontró medio desorganizado el Concejo Municipal y empezó a buscar aliados para los programas que tenía en mente desarrollar en la principal urbe de Canadá.
A rasgos generales sus proyectos para la ciudad de Toronto han sido exitosos. Hablar de ellos en detalle nos ocuparía más del limitado espacio de esta Encrucijada. Pero son significativos aquellos dirigidos a disminuir la pobreza en los vecindarios pobres de Toronto, como, por ejemplo, proporcionar a los estudiantes de la educación primera el acceso gratuito a los autobuses de la TTC.
Pero nos vamos a enfocar en hechos recientes en los que el alcalde Tory ha jugado un papel importante en la búsqueda de soluciones.
A raíz del aumento de la violencia armada en la ciudad, Tory salió con la solución de crear trabajo para jóvenes marginados con el fin de que no caigan en la violencia callejera. Hemos sido testigos de ver brigadas de jóvenes estudiantes haciendo labores de limpieza colectiva en edificios de Toronto Community Housing Corporation (TCHC).
Con el fin de erradicar la violencia, Tory también dijo hace días que la alcaldía ampliará los servicios sociales para los jóvenes de los vecindarios pobres de Toronto, después de haber declarado que los tres niveles de gobierno habían acordado separar $15 millones de dólares destinados a dicho fin.
En lo que respecta a la crisis de los refugiados que cruzan irregularmente la frontera, que se dirigen hacia Toronto procedentes de los Estados Unidos, a ojos cerrados Tory ha buscado la forma de alojarlos bajo costos de la alcaldía.
Unos 800 refugiados fueron alojados por iniciativa de Tory en edificios de dormitorios de dos colegios universitarios de esta ciudad, hasta que se reiniciaran las clases en este mes. La semana pasada, el alcalde anunció que esas personas fueron reubicadas en hoteles, moteles y viviendas particulares para vaciar los dormitorios.
Tras la negativa del premier Doug Ford de ayudar a la solución de la crisis de los refugiados, Tory apeló al gobierno federal, que desembolsó $15 millones de dólares para asilados y peticionarios de refugio.
Estas iniciativas nos hacen cuestionarnos: ¿Es John Tory el alcalde que necesitaba la ciudad de Toronto?
Sin rodeo, diremos que “sí”. Las circunstancias adversas que se han presentado durante su gobierno municipal han hecho que Tory actúe con cautela, dando pasos firmes para solucionar los problemas que ha encontrado en su gestión como alcalde.
Y lo ha logrado de tal manera que, con excepción de sus detractores, la ciudadanía concuerda en que las respuestas de Tory han sido las más eficaces para atacar los problemas de esta ciudad.
John Tory busca la reelección para quedarse como alcalde de Toronto por cuatro años más. ¿Logrará reelegirse? La percepción que se tiene es que ganará por un amplio margen de votos. Pero en las elecciones municipales del 22 de octubre los votantes dirán si John Tory es el alcalde que necesita nuestra ciudad.