(EFE).- La ministra ecuatoriana de Gobierno, María Paula Romo, cifró este domingo en 477 los detenidos durante los disturbios registrados en las manifestaciones en contra de la eliminación de los subsidios a los combustibles, decidida en el marco de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En una entrevista televisada junto al ministro de Defensa, Oswaldo Jarrín, Romo puntualizó que la mayor parte de las detenciones tienen que ver con actos de vandalismo que se desataron en medio de las protestas por el alza de los precios de los carburantes.
Comentó que el pasado jueves, durante el primer día de una huelga de los transportistas (suspendida parcialmente el viernes) se registraron actos vandálicos, saqueos, en los que participaron más de 3.000 personas.
Asimismo detalló que en los disturbios contra la decisión del Ejecutivo, se quemaron 12 patrulleros y se atacó a 11 ambulancias.
“Nunca la violencia es el camino y algunos han excedido en mucho lo razonable”, apuntó al añadir que “no es aceptable” que entre las medidas de fuerza se haya retenido a cerca de medio centenar de policías y militares.
Descartó que no se hayan reportado fallecidos en el país como resultado de enfrentamientos en las protestas, aunque sí ha habido militares, policías y civiles heridos, y, el caso más grave en este último grupo -dijo- fue el de una persona afectada en un ojo.
Se lamentó del fallecimiento hoy de un ciudadano, que fue atropellado por un vehículo en la provincia del Azuay y que no pudo recibir atención médica inmediata porque la ambulancia no pudo pasar debido a los obstáculos de los manifestantes en las carreteras.
Personal del Ministerio de Salud informó de que alrededor del mediodía “se encontró a un hombre de 35 años sin signos vitales, víctima de un atropello por un vehículo que aparentemente huía del lugar al ser agredido por comuneros que mantienen bloqueada la vía pública”, señaló la Comisión de Tránsito de Ecuador (CTE).
Edison Moscoso, director provincial de la CTE, dijo que “aparentemente se trata de un vehículo privado que habría ocasionado este accidente lamentable” en la vía Cuenca-Molleturo.
De su lado, Jarrín aprovechó la entrevista en cadena nacional para transmitir a los militares un mensaje del jefe de Estado, Lenín Moreno.
“Absoluto respaldo para el cumplimiento de sus labores con la finalidad de mantener el orden público y garantizar los derechos de la población a nivel nacional, en sus libertades y las garantías para que puedan desarrollar sus actividades diarias”, trasladó.
Jarrín explicó que las Fuerzas Armadas son cautelosas pero pidió que no se las desafíe ni se agreda a los militares, pues “tienen derecho a la auto defensa como cualquier ciudadano”.
Según el funcionario, no existe en el país un problema de desabastecimiento por el corte de las vías de los manifestantes, y reveló que han usado un avión C 130 para trasladar 18 toneladas de abastecimiento entre Quito y Cuenca.
Según la Secretaría de Comunicación de la Presidencia, “la normalidad ha retornado paulatinamente a la gran mayoría de provincias del país”, pero en algunos sitios de la sierra “existen amenazas de paralizaciones y cierres de vías”.
Y por ello, para “garantizar la seguridad” y preservar “la integridad de niñas, niños y adolescentes”, el Gobierno dispuso que no se reanuden mañana -como estaba previsto- las clases en la zona andina, suspendidas desde el pasado jueves.
Los colectivos indígenas de Ecuador han elevado el tono de su protesta contra Moreno, quien este domingo se mostró dispuesto al diálogo.
En un corto mensaje televisado a la nación, el gobernante aseguró que está decidido a cambiar el país, a que se sancione a quienes han robado a la nación, a que se controlen los precios y se castigue a los especuladores.
“Pero siempre también estoy decidido a dialogar, a tender la mano a la gente decente, a la gente honesta que quiere realmente cambiar el país, estoy decidido a dialogar con ustedes hermanos indígenas”, dijo.
Y añadió: “Dialoguemos sobre cómo usar los recursos del país para los más necesitados”.
La mañana de este domingo, Jaime Vargas, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), que encabeza las protestas, aseguró que están “cerradas” las posibilidades de diálogo con el Gobierno.
Reiteró que los indígenas avanzarán desde el interior del país a la capital ecuatoriana, Quito, para unirse a la huelga de sindicatos y otras organizaciones sociales prevista para el miércoles.